El problema de la falta de microchips y los parones por coronavirus en algunos países le costarán a Renault alrededor de 500.000 vehículos que dejará de producir en 2021, según las previsiones avanzadas por la compañía francesa que dirige Luca de Meo. En términos de ventas y facturación, el impacto para el grupo son importantes descensos en lo que llevabamos de año.
Las ventas de Renault cayeron un 22,3 % hasta las 599.027 unidades entre julio y septiembre, mientras que la facturación bajó un 13,4 % hasta los 8.987 millones de euros, según detalló la compañía en un comunicado. La pérdida de producción del tercer trimestre, debida sobre todo a la falta de componentes (tanto por la falta de semiconductores como por los trastornos de las cadenas logísticas globales) se evalúa en unos 170.000 vehículos. En esas unidades están incluidos los vehículos que se han dejado de producir en las plantas de Valladolid y Palencia, en las que se aplica un ERTE para reducir la producción y se han suprimido turnos con traslado de empleados afectados.
"La escasez de semiconductores ha sido más fuerte de la prevista al final del primer semestre", explicó la directora financiera del grupo, Clotilde Delbos, señaló en una conferencia con analistas, en la que apuntó también a los problemas de transporte y la disponibilidad de contenedores. Aun así, el grupo Renault, que incluye también a marcas como Dacia, Lada o Alpine, confía en alcanzar sus previsiones de un margen operativo del 2,8 % de su facturación para el conjunto del año.
Seis meses de espera para el Sandero
Renault destacó que su volumen de pedidos está en su nivel más alto en 15 años, ya que acumula 2,8 meses de ventas. Delbos subrayó el éxito de los nuevos modelos lanzados en los últimos meses, como el Renault Arkana o los vehículos comerciales ligeros de la marca del rombo. Y sobre todo, de los Dacia Sandero, Duster y Spring. El nuevo Sandero tiene un período de espera de casi seis meses, recalcó.
Aseguró también que Renault mantiene sus objetivos de avanzar hacia la electrificación de su gama, y recalcó que el grupo va camino de que este año un 20 % de todas sus ventas mundiales sean de vehículos eléctricos o híbridos.
En el apartado financiero, Delbos destacó que el recorte de costes fijos de 2.000 millones de euros, una meta lanzada en 2020 en plena pandemia, se logrará "en las próximas semanas" y continuará extendiéndose. Por ello, señaló que el grupo mantiene sus previsiones financieras para el ejercicio 2021 "a pesar del deterioro de la disponibilidad de componentes en el tercer trimestre".
