El nuevo expediente de regulación temporal de empleo (ERTE) acordado en Seat empieza a aplicarse este lunes 27 de septiembre con nuevos parones. La planta de cajas de cambio de El Prat de Llobregat (Seat Componentes) estará inactiva durante un periodo de 17 días ante el exceso de stock, mientras que la factoría de Martorell y la de Barcelona estarán paradas, de momento, dos días.
Seat comenzará a aplicar el nuevo ERTE en el primer día previsto para tal fin, el lunes 27 de septiembre, ante la necesidad de reducir la producción por la falta de componentes que integran microchips. Las tres líneas de montaje de Martorell estarán paralizadas los días 27 y 28 de septiembre, con lo que alrededor de 11.000 empleados estarán en situación de desempleo.
Exceso de cajas de cambio
Los frecuentes parones en el montaje de vehículos, tanto de Martorell como de otras plantas del grupo Volkswagen para las que trabaja Seat Componentes, ha salpicado también a la factoría de cajas de cambio de El Prat, que acumula un stock elevado ante la nueva situación de recorte de fabricación de automóviles. Por ello, la dirección de la factoría ha anunciado un paro del 27 de septiembre hasta el 13 de octubre.
La empresa ha empezado ya a buscar trabajadores voluntarios para entrar de forma rotatoria en la bolsa de afectados por el ERTE de forma estable cada día. El ERTE prevé que la cifra máxima de afectados diarios llegue a 1.276 empleados y que haya un mínimo de 482 en el mejor escenario esperado.
De momento, Seat suprime un turno parcial de producción nocturno en la línea de montaje número 1 (Ibiza y Arona) a partir del día 27 de septiembre. En función de la gravedad de la crisis provocada por la escasez de chips, la compañía prevé cancelar otro medio turno o uno entero en la línea número dos (León y Formentor).
72 días de inactividad
Además de la bolsa de afectados diarios, incluso en las jornadas en que haya producción, el ERTE acordado con UGT y CCOO prevé la supresión de un máximo de 430 turnos en Martorell, lo que equivale a unos 72 días de inactividad completa desde el 27 de septiembre hasta el 30 de junio de 2022.
Fuentes de Seat han indicado que, una vez se ponga en marcha el ERTE, se mantendrá la monitorización de la crisis de los chips día a día para decidir los días de paralización de la actividad. Seat se encuentra en una situación de aumento de los pedidos hasta superar los niveles anteriores a la pandemia, aunque sufre retrasos en la entrega de los turismos, como casi todos los fabricantes de automóviles. Solo algunas marcas asiáticas están sacando provecho de su mayor disponibilidad de stock de vehículos en la complicada coyuntura actual.
