El dieselgate español, que suma unos 700.000 afectados, se juzgará finalmente en Alemania. El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno ha confirmado la previsión de muchas de las partes implicadas y ha comunicado el traslado del caso a la Fiscalía de Braunschweig para centralizar la investigación y el juicio a los afectados por el fraude de los motores diésel de Volkswagen.
El traspaso de las diligencias incluye la traducción al alemán de todo el sumario recopilado hasta ahora en el Juzgado Central de Instrucción número dos de la Audiencia Nacional. La causa será equivalente a una denuncia, según afirma el magistrado en el auto al que tuvo acceso Europa Press.
El titular del juzgado advierte de que el traslado de la causa no implica que haya entrado en el fondo del asunto ni que exista compromiso alguno de absolución o no acusación de Volkswagen y sus marcas filiales, algo que tendrá que deliberar la justicia alemana.
Diferencias con Alemania en el dieselgate
La Asociación de Afectados por Volkswagen, que agrupa a 12 bufetes de abogados que representan a más de 3.000 afectados, ha denunciado la voluntad de Volkswagen de dilatar el proceso y la inacción de la Administración española a diferencia de la actuación en Alemania, donde la compañía ha tenido que aceptar sanciones.
Una de las consecuencias del traslado de la causa a Alemania será la imposibilidad de que haya más denunciantes por la vía penal una vez que se acabe el plazo para alegaciones a la resolución del magistrado español.
Retorno del importe de un coche en Alemania
El anuncio del traslado de las diligencias ha coincidido con la publicación de la noticia de la primera sentencia en Europa que reconoce el derecho de un afectado por el dieselgate a recibir como compensación el importe que le costó el coche de Volkswagen que compró. De esta manera, el demandante percibirá casi 30.000 euros gracias al fallo del Tribunal Civil de Augsburgo.
La compañía ha anunciado que presentará recurso contra la sentencia al considerar que los clientes no han sufrido pérdidas ni daños ya que los vehículos con el motor trucado son seguros y aptos para circular con la subsanación del software ilegal. Volkswagen ha recordado que la gran mayoría de las 9.000 demandas sentenciadas han dado la razón a la empresa.