La multinacional alemana Continental ha tirado la toalla en la búsqueda de un inversor interesado en su fábrica de Rubí, que cerrará sin ninguna alternativa. El consejo de administración del proveedor del automóvil ha anunciado el inicio del proceso para el cese de producción y su traslado a otros centros, lo que dejará en el paro a 760 empleados que ya han aceptado las condiciones de indemnización.
Los sindicatos tenían la esperanza de que las gestiones que se estaban llevando a cabo para encontrar alguna compañía interesada en tomar el relevo o en reconvertir las instalaciones y la plantilla dieran resultados. Pero la compañía ha dado por finalizado ese proceso de reindustrialización y ha puesto en marcha el cese de producción, hasta 2021, en Rubí de pantallas y relojes analógicos. Esa producción, de un producto que va a a la baja al ser sustiuido por sapicaderos digitales, será trasladada otra planta de la multinacional.
Deslocalización de producción
La compañía ha tardado solo unos 15 días en dar por muerto el proceso de búsqueda de un relevo industrial desde que el pacto sobre indemnizaciones fue ratificado. En ese momento, el sindicato CCOO exigió a la firma que se volcara plenamente en las gestiones para atraer un nuevo proyecto industrial, algo que finalmente no se ha conseguido.
El cierre de la factoría saldrá bastante caro a Continental, que pagará una indemnización de 62 días de sueldo por año trabajado con un tope de 44 mensualidades, una cifra muy superior al mínimo legal de 20 días con un máximo de 12 nóminas. Además, los trabajadores que tengan un mínimo de 55 años en el momento de la extinción del contrato podrán acogerse a las condiciones de las prejubilaciones, que prevén que se complemente la prestación de desempleo hasta llegar a entre el 80% y el 100% del salario, en función de la edad.
20.000 despidos en el grupo
El consejo de supervisión de Continental ha aprobado en una reunión los próximos pasos de su programa de transformación de 2019 y hasta 2029, que incluyen también el cierre de una factoría en México. Continental dijo en septiembre del año pasado que hasta 20.000 empleados podrían verse afectados por los cambios hasta 2029, porque quiere reducir costes brutos de unos 500 millones de euros anuales a partir de 2023.
CCOO ha lamentado la decisión de abandonar la reindustrialización, que hubiera permitido mantener empleos y actividad productiva. El sindicato ha denunciado que se eneteró de la decisión por una comunicación interna en lugar de en la mesa de reindustrialización creada con la compañía.