En un momento en el que numerosas empresas recortan gastos e inversiones por la crisis del coronavirus, el grupo BMW ha confirmado una inversión de 30.000 millones en investigación y desarrollo hasta 2025 para adaptarse a las nuevas tendencias del negocio y de la movilidad. El fabricante alemán de automóviles BMW destinó 6.400 millones a I+D durante el año pasado y su previsión es invertir más de 30.000 millones en esta partida hasta 2025, según informó la empresa.
La compañía explicó que el objetivo de estas inversiones es desarrollar las soluciones de movilidad del futuro, así como asegurar su éxito comercial a largo plazo y seguir apostando por la innovación en sus productos y procesos.
La multinacional automovilística indicó que en la actualidad cuenta con más de 15.700 personas repartidas en 12 países que se dedican al desarrollo de nuevas tecnologías en los campos del diseño, la automatización, la conectividad, la electrificación y en los servicios.
"Líder de innovación"
El presidente de la compañía, Oliver Zipse, afirmó, durante la presentación de los resultados de 2019, que las nuevas tecnologías son "clave" para el futuro de la movilidad, por lo que indicó que los 30.000 millones destinados a I+D hasta 2025 buscan reforzar la posición de la compañía como "líder de innovación".
"La habilidad de integrar diversas tecnologías para formar un sistema completo es de vital importancia. Las empresas capaces de desarrollar y combinar hardware y software en igual medida conformarán el futuro del automóvil. En este sentido, vamos por la vía más rápida", aseguró el directivo.
BMW presentó hace unos días unos resultados en el primer trimestre con un aumento de la facturación del 3,5% y un descenso del beneficio casi imperceptible del 2,4%.
