La recupeación de la automoción hasta los niveles que había antes de la pandemia tardará más de lo que se había previsto aunque dependerá del grado de internacionalización de las compañías y del acceso a los fondos europeos de reconstrucción Next Generation EU, según ha advertido el Clúster de la Industria de Automoción de Catalunya (CIAC) en un encuentro 'online' con empresas del sector.
El presidente dd CIAC, Josep Maria Vall, prevé que la recuperación de la industria de automoción se demorará hasta 2022 a la vista de cómo ha empezado este año 2021. Sin embargo, las previsiones de producción que comunican las marcas de automóviles son elevadas, especialmente en China, por lo que las empresas que tienen más presencia en ese mercado asiático "irán mejor este año", ha advetido en su intervención en el encuentro digital.
Vall ha advertido de que "la industria del automóvil está en un momento de incertidumbre total" que obliga a las empresas a actuar y tomar decisiones en relación con las ayudas públicas anunciadas por la Unión Europea. "Ahora ya no tenemos tiempo de ver qué ocurre, tenemos que ponernos a trabajar porque si no, no llegaremos a tiempo en los fondos europeos", ha destacado.
Proyectos de Cataluña
El CIAC trabaja en la promoción y coordinacion de proyectos de la automoción catalana centrados en los ejes de vehículo conectado, energías renovables, industria 4.0, nuevos productos y materiales sostenibles, formación y talento y nuevos modelos de negocio. El director del clúster, Josep Nadal, ha anunciado la intensificación de los trabajos técnicos de coordinación y discusión de los proeyctos con la convocatoria de reuniones entre las compañias de automoción y proveedores del sector.
La socia de automoción de KPMG, Begoña Cristeto, ha recomendado a las empresas que se pongan manos a la obra en sus proyectos para estar preparadas ante las próximas convovatorias por parte de los ministerios con competencias, aunque ha advertido de que la abundancia de candidaturas que se prevé hará necesario presentar unas solicitudes bien trabajadas y que se austen al máximo a los criterios demandados por el Gobierno central.