Toyota fue pionera en los coches híbridos pero se demoró en entrar en la electrificación. Sin emabrgo, ahora Toyota quiere electrificar tanto sus coches de futuro como los antiguos que siguen circulando en manos de sus millones de clientes. Para conseguirlo, Toyota quiere ofrecer una opción para adaptar los antiguos vehículos de combustión a una propulsión eléctrica o de hidrógeno.
El presidente de Toyota, Akio Toyoda, hizo su declaración de intenciones en una presentación en el salón de personalización de automóviles de Tokio. "No queremos dejar atrás a ningún amante de los automóviles", proclamó Toyoda después de desvelar dos prototipos sin emisiones de un modelo deportivo de los años 80.
El viejo Toyota AE86 de los años 80 ha revivido con una motorización 100% eléctrica y otra basada en pila de combustible de hidrógeno como símbolos de las posibilidadees que se abren a partir de ahora para electrificar el parque automovilístico ya existente.
Tecnología en desarrollo
"Es importante brindar opciones para los amados automóviles que ya son propiedad de alguien", agregó Akio Toyoda, que advirtió de que la tecnología de conversión de la propulsión de combustión a otra sin emisiones "todavía está en desarrollo". El desafío es, según el directivo, "continuar conduciendo nuestros queridos automóviles incluso en una era de neutralidad de carbono".
Akio Toyoda considera que la via a la adaptación de los vehículos anteriores es la única forma de conseguir realmente una reducción de emisiones. "Muchos fabricantes de automóviles apuntan -dijo el presidente de Toyota- a un cambio a vehículos eléctricos de batería alrededor de 2030-40. Sin embargo, la realidad es que no podemos lograr cero emisiones de carbono en 2050 simplemente cambiando todas las ventas de coches nuevos a vehículos eléctricos".
