Las previsiones optimistas de Fira de Barcelona y del sector del automóvil sobre las ventas en el Salón Ocasión de Barcelona se han quedado cortas. La muestra ha finalizado con un 86% de los coches que se exponían vendidos a los visitantes, una cifra que supone un nuevo récord en el salón.
La edición número 38 del Salón Ocasión de Barcelona ha concluido con una saldo comercial nunca antes conseguido de más de 3.000 coches comercializados durante los 10 días en que ha estado abierta la muestra, según ha informado Fira de Barcelona a través de un comunicado. Esa cifra de coches vendidos supone el 86% de los 3.500 vehículos que las más de 30 marcas, concesionarios y vendedores presentes en el salón habían llevado al recinto ferial de Montjuïc con la esperanza de venderlos.
Los más de 3.000 coches vendidos suponen un incremento del 10% en relación con los 2.700 registrados en la anterior edición de 2017. Los coches con un máximo de tres años de antigüedad y un precio de 15.000 a 30.000 euros han sido los favoritos de los clientes del salón.
Mejora del mercado
Los descuentos y las promociones ofrecidos por marcas y distribuidores han contribuido a atraer un mayor número de visitantes y a incrementar las ventas. En el salón había coches con un descuento medio del 25% pero que llegaban en muchos casos al 40% en relación con el precio del mismo coche nuevo.
El presidente del Salón Ocasión y de la Federación Catalana de Vendedores de Vehículos a Motor (Fecavem), Jaume Roura, ha destacado que "la afluencia de gente y las ventas durante el salón son evidencias claras de que el sector del vehículo seminuevo está pasando por un buen momento".
Un estudio de Fecavem y del Gremi del Motor de Barcelona prevé que el mercado de vehículos de ocasión acabe 2018 con un aumento del 9,6% en Cataluña, mientras que en el conjunto de España subirá un 15,2%.