El Gran Premio de Fórmula 1 disputado en Montmeló se convirtió en una cita multitudinaria y en una cumbre del sector de automoción. La carrera unió a dirigentes de la industria automovilística y del Gobierno central y la Generalitat y hubo algunos reencuentros de viejos colegas que siguieron caminos en marcas diferentes.
La carrera reunió a 121.667 espectadores en las gradas y las laderas del Circuit de Barcelona-Catalunya de Montmeló, una de las cifras más altas de asistencia en su historia que da oxígeno al trazado y a la competición reina del Motorsport basada en coches híbridos de gasolina y que muestra los retos de la movilidad eléctrica. Las ganas de volver al circuito también se notaron entre los dirigentes de varios fabricantes automovilísticos y dirigentes políticos que no quisieron faltar a la cita. Entre ellos se encontraban la ministra de Industria, Reyes Maroto, y el 'conseller' de Empresa, Roger Torrent.
De Meo y su fichaje Griffiths
Renault, marca propietaria de la escudería Alpine, ejerció de anfitriona y reunió en la mesa de su Motorhome a Reyes Maroto, el consejero delegado de Renault, Luca de Meo, el responsable mundial de producción del grupo y presidente de Renault España, José Vicente de los Mozos, así como a Wayne Griffiths, presidente de Seat y también de la patronald e fabricantes Anfac. El piloto de Alpine Fernando Alonso también se dejó ver en esa cumbre del sector del automóvil justo antes del inicio de la carrera.
De Meo se reencontró con Griffiths, uno de sus fichajes en su etapa al frente de Seat y que tomó el relevo de la presidencia de la filial española de Volkswagen. Además, desde hace poco Griffits recibió el testigo como presidente de Anfac de manos de José Vicente de los Mozos, que también se sentó en la mesa de Alpine. En el circuito también fue posible ver a dirigentes de otras marcas como Polo Satrústegui, director general de Hyundai en España.
Durante estos días, el sector del automóvil anda entretenido haciendo el recuento de los proyectos que se presentan al PERTE del vehículo eléctrico y de los fondos que se podrían otorgar sobre el montante total de casi 3.000 millones de euros. La última candidatura se anunció el sábado y suma una inversión de 266 millones a cargo de Stellantis en sus tres fábricas españolas de Zaragoza, Vigo y Madrid. El proyecto más importante y favorito sigue siendo el de Seat y Volkswagen, que incorpora la planta de baterías de Sagunto y que suma 10.000 millones de inversión en la última contabilización.
Presentes y ausentes en el PERTE
La ministra de Industria ya ha recibido el proyecto de Seat y Volkswagen y el de Stellantis, junto a otros como el de la reindustrialización de Nissan de Barcelona, pero espera todavía las inversiones que probablemente presentará Renault en los próximos días para optar también al PERTE. Le quedarán todavía los proyectos de otros grandes grupos de fabricantes, aunque el plazo para registrarlos acaba a principios de junio tras la segunda prórroga aprobada por el Ministerio de Industria.
A Reyes Maroto se la vio relajada durante su visita de dos días al circuito catalán de carácter privado aunque con algunas citas ineludibles con el sector como la comida en Alpine o la entrega de los premios de la competición femenina W Series. Sin embargo, renunció a la entrega de los trofeos de la F1, lo que permitió que Roger Torrent tuviera el protagonismo y evitó tensar más la relación del Gobierno central con los dirigentes independentistas.