La Fórmula 1 aterriza en el Gran Premio de Australia, una de esas carreras donde nos toca trasnochar y madrugar, al menos en España, pero no nos importa ni lo más mínimo. El Podcast Técnica Fórmula 1 se prepara para este especial fin de semana, con un circuito precioso, un ambiente alucinante, y que todos los años merece la pena el esfuerzo y el madrugón, máxime cuando hay expectación por ver qué hacen los pilotos nacionales - y el resto, a quienes también seguimos con entusiasmo.
Una pista distinta
La de Melbourne es una pista algo distinta, también rápida aunque no tanto como Jeddah, en cuanto a la media de velocidad. Seguimos en trazados urbanos, pero este es bien distinto a otras pistas del calendario, así que será una nueva prueba de fuego para ver el rendimiento real de cada equipo, más allá de Red Bull que, como vemos, están fuertes en todos los contextos.
Después de una semanas de campeonato deberían de llegar las primeras novedades técnicas importantes: ¿veremos ya el nuevo concepto de Mercedes? ¿o es pronto? ¿va a espabilar Ferrari con el setup y con novedades para salir de esa cuarta posición tan poco decorosa para un equipo como ellos?
Son muchos los interrogantes que se van a despejar este fin de semana, pero antes del mismo podemos estar preparados gracias a la previa que se hace desde el Podcast Técnica Fórmula 1. Nos comentarán que esperan de la carrera y qué características destacan en el trazado desde el punto de vista técnico.
Datos de la pista según Pirelli
Para este fin de semana se han escogido los compuestos C2, el duro (blanco), C3, el medio (blanco), y C4, el blando (rojo). La FIA ha confirmado cuatro zonas de D.R.S. en Albert Park, así pues este año podrían alcanzarse unas velocidades máximas más rápidas que nunca en Melbourne, en teoría podrían llegarse a los 340 km/h.
Los neumáticos son similares a los que se seleccionaron en 2019, puesto que la elección del año pasado (el C2, el C3 y el compuesto más blando, es decir el C5) no fue bien recibida: sólo se usaron los medios y los duros, mientras que los C5 quedaron sólo para la clasificación. Volver a la selección anterior significa que habrá más opciones, en términos de estrategia, para la carrera. Al menos sobre el papel.
El circuito fue reasfaltado en 2022 con algunos elementos metálicos incluidos en el árido, mejorando así el agarre de los neumáticos. Este nuevo asfalto es más liso que el de otras pistas del campeonato, y el máximo agarre solo se consigue tras varias sesiones de rodaje en pista.
La demanda de energía de los neumáticos en el Gran Premio de Australia está en torno a la media de la temporada, con niveles contenidos de abrasión. Una configuración del coche que favorezca la tracción puede ser especialmente útil a la salida de las curvas para aumentar las posibilidades de adelantar con éxito en las cortas rectas de este circuito.
Historia de la carrera de “casa” para Piastri
El Gran Premio de Australia abría tradicionalmente el Campeonato desde que se trasladó desde Adelaida a Melbourne, en 1996. Así fue hasta 2019, con las únicas excepciones de 2006 y 2010, cuando el primer gran premio tuvo lugar en Bahrein.
Las carreras de 2020 y de 2021 fueron canceladas debido a la pandemia global de COVID, y Melbourne volvió al campeonato el año pasado como 3ª ronda, después de las dos primeras carreras inaugurales en Oriente medio, al igual que ocurrido este año.
Además, el nuevo trazado inaugurado el año pasado favorece los adelantamientos, especialmente en el segundo sector. El GP de Australia, verdadera carrera de casa para Piastri, que nació en Melbourne, no lejos de Albert Park, se corre en una pista cuyas características son su fluidez y sus curvas rápidas, sobre todo tras las modificaciones del año pasado.