Fernando Alonso es incombustible. El próximo mes va a cumplir 41 años (Oviedo, 29 de julio de 1981) y el pasado fin de semana en Canadá volvió a impartir otra exhibición de pilotaje, recibiendo el elogio unánime por su rendimiento. El asturiano, brillante sobre el agua cuando se igualan las prestaciones de los coches, arrancó desde la primera fila y en carrera la novena posición que refleja la clasificación no respondía a los méritos contraídos.
Pese a la edad mantiene la ilusión de sus inicios. En el espectacular fin de semana de Montreal lo rubricó, refrendando su carácter, clase y ambición. En la lucha por la pole, en la que fue segundo, obtuvo el mejor resultado desde el GP de Alemania de 2012. En una carrera que llegó a liderar, por otro lado, no tuvo suerte y las circunstancias de la misma –un VSC y un safety car- lastraron sus opciones y de quinto pasó a séptimo, que acabó siendo noveno por una sanción final de 5 segundos por zigzaguear en la recta para contener el ataque de Bottas.
El asturiano disputó en Canadá su 343 gran premio en la Fórmula Uno, siendo el segundo piloto de todos los tiempos que más carreras ha disputado por detrás de Kimi Raikkonen, que hizo 350. Con dos títulos, 32 victorias, 22 poles y 98 podios en el campeonato, volvió en 2021 para quitarse una espina clavada.
Fernando Alonso con Renault en Montmeló / RENAULT
Retomar el reto
Desde que ganó el GP de España de 2013 y subió al podio en Hungría 2014 sus resultados no habían estado acorde a su nivel. El movimiento a McLaren, entonces propulsado por Honda, fue un rotundo fracaso. Alonso se mantuvo ‘vivo’ compitiendo lejos de la F1, refrendando semana sí semana también su talento. Destacó en disciplinas tan dispares como son la Resistencia, ganando en Daytona, Le Mans y coronándose como campeón del mundo, o el Dakar e Indianápolis, donde también dejó su huella en las míticas 500 Millas.
La ambición de Fernando hizo que retomara el reto de la F1 cuando le llegó una firme propuesta de Alpine. El bicampeón español vio en el cambio de reglas de 2022 una excelente posibilidad para cambiar el orden establecido de la parrilla y, bajo el amparo de Renault, su escudería aspira a luchar por podios en un futuro cercano. Las prestaciones del coche no son las deseadas, pero sí ha dado un paso hacia delante con respeto al anterior ejercicio y ha mostrado un nivel esperanzador pese a los problemas de fiabilidad del arranque de la temporada.
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El futuro y los récords
La renovación de Fernando va de boca en boca. Unos apuestan a que Alpine se decantará por el joven Oscar Piastri y que el asturiano podría recalar en Aston Martin si Sebastian Vettel no continúa, pero lo cierto es que el equipo francés siguen contando con la experiencia, madurez y talento de Alonso para el futuro y su permanencia depende de lo que quiera hacer el piloto español. Lo más probable, hoy, es que siga en Alpine.
Fernando, que se ve con fuerzas para seguir al más alto nivel otros dos años, como mínimo, batió en Bakú un récord de longevidad de Michael Schumacher con 21 años, 3 meses y 8 días desde su debut al GP de Azerbaiyán. Por otro lado, debutante en 2001, lleva 19 temporadas en F1, las mismas que estuvieron Schumacher, Barrichello y Raikkonen, con lo que si permanece en la parrilla el próximo curso se convertirá en el piloto que más años ha competido en la máxima categoría del automovilismo.
Este año, de momento, se convertirá también en el piloto que habrá disputado más grandes premios de la historia, marca que ostenta hoy Raikkonen. Alonso igualará en el GP de Italia de este año al piloto finlandés, quien se retiró con 350 Grandes Premios a sus espaldas, superándole en Singapur.
