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Los astronautas de la NASA despegan con un Tesla

Los dos tripulantes del último vuelo espacial se dirigieron al cohete en un Tesla Model X que demuestra que es apto para astronautas

Los astronautas frente al Tesla Model X que los llevó al cohete / NASA

Los astronautas frente al Tesla Model X que los llevó al cohete / NASA

Helena Martín

31.05.2020 15:05h

2 min

Elon Musk prometió llevar uno de sus coches eléctricos al espacio. Va camino de conseguirlo. De momento ha logrado que los astronautas que que se encuentran en la órbita terrestre desde la noche del sábado en la misión de la NASA y SpaceX hayan iniciado su camino al espacio en un Tesla Model X. El resultado de esta particular prueba es que el SUV de Tesla es apto para transportar astronautas con sus pesados trajes.

Las puertas traseras con forma de ala de gaviota o de halcón, como le gusta definirlas a la marca, con apertura y cierre automatizados permitieron que los astronautas Robert Behnken y Douglas Hurley accedieran con comodidad al todocamino de lujo del fabricante de vehículos eléctricos Tesla. Elon Musk ha conseguido que en la primera misión de un vuelo tripulado subcontratada por la NASA a una empresa privada, SpaceX, también del emprendedor afincado en EEUU, los coches de Tesla hayan tenido un papel relevante en los traslados de los astronautas y de personal técnico en el centro espacial Kennedy de Florida.

Comodidad incluso con el casco

Elon Musk ha convertido esta misión espacial no solo en un reto técnico conseguido con un lanzamiento exitoso, sino también en un publireportaje de las bondades de los vehículos eléctricos de Tesla. La retransmision de todos los movimientos de los astronautas y los preparativos han mostrado el Tesla Model X de forma especial. 

En las imágenes previas al lanzamiento, se pudo ver a los astronautas entrar por su propio pie y sin ayuda en el espacioso interior del SUV grande de la marca con sede en California. Pudieron entrar y sentarse en los asientos posteriores incluso con los cascos colocados sin problema gracias a la altura disponible para las cabezas en este modelo.

El Tesla Model X ha dejado de ser el único SUV de la marca norteamericana gracias a la incorporación a su gama del nuevo Tesla Model Y, un todocamino más compacto basado en el Model 3 y con el que la firma quiere llegar a un público más amplio no tan elitista como pagar el precio básico de 88.990 euros. 

 

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