El Tesla Model 3 ya ha llegado, como mínimo a Estados Unidos. El modelo estrella con el que la marca propiedad de Elon Musk pretende revolucionar la movilidad eléctrica conectando con las masas sale hoy oficialmente de la fábrica de Tesla. Para que tengas claro por qué el Tesla Model 3 se ha convertido en el centro de todas las miradas, aquí tienes un resumen de sus características y sus consecuencias sobre la electromovilidad.
Un deportivo eléctrico por 35.000 dólares
El Tesla Model 3 es un deportivo basado en la versión berlina Model S, que hasta ahora era el modelo superventas de la marca norteamericana. Sin embargo, a diferencia del Model S su hermano pequeño cuesta aproximadamente la mitad, con un precio inicial de 35.000 dólares. Si a ese precio le restamos las ayudas públicas, el nuevo modelo se queda por menos de 30.000 euros, lo cual empieza a ser un precio competitivo en comparación con otros modelos eléctricos a la venta. El líder del mercado en España, el Nissan Leaf, se vende a partir de 20.300 euros con las subvenciones disponibles.
Menos potente que el Model S
El Tesla Model 3 es el coche eléctrico asequible de Tesla que ya tiene una lista de espera que va camino de las 300.000 peticiones de clientes que tienen que depositar 1.000 euros para hacer la reserva. Las prestaciones del Model 3 están por debajo del Model S o del Model X. La autonomía con una carga de batería llega a 345 kilómetros, frente a los 572 de los modelos más caros. La aceleración de 0 a 100 kilómetros por hora se consigue en menos de seis segundos.
Marketing desde la producción
A diferencia de otros fabricantes convencionales, Tesla ha adoptado los nuevos formatos de marketing de Apple. Por eso cualquier evento o anuncio relacionado con los modelos de la marca crea una gran expectación. La entrega de las primeras unidades a los primeros clientes afortunados que han esperado pacientemente será retransmitida en directo por redes sociales e internet a las 5.45 horas del sábado 29 de julio. Es muy probable que entre los espectadores de ese acto inédito en la industria de automoción se encuentren una legión de espías de los inversores que esperan que el valor de las acciones de la compañía frenen su caída y empiecen a subir y observadores de los fabricantes de automóviles que siguen de cerca a Tesla y a su nueva apuesta, el Model 3.