El circo de la Fórmula 1 vuelve a arrancar con nuevas exigencias y más inversiones. Los 10 equipos que compiten en la temporada 2019 han incrementado sustancialmente su apuesta inversora, que supera los 2.300 millones de euros (2.600 millones de dólares).
Todo por arañar unas milésimas de segundo por vuelta que pueden marcar la diferencia y decantar la balanza a favor de algunos de los equipos favoritos entre las 10 escuderías. Los equipos que tienen más opciones de ganar el campeonato suelen ir asociados a unos niveles de inversión más elevados. Es el caso de Ferrari y Mercedes, que superan los 500 millones de euros, según una información publicada por Forbes.
En el ranking de los equipos de F1 con más inversión, la suma de Red Bull y Toro Rosso aparece en tercera posición con 425 millones de euros según los datos de años pasados. Renault ocupa la cuarta posición con 373 millones de euros de gastos. A continuación se encuentra McLaren, con 226 millones; Williams, con 200 millones; Force India, con 128 millones, y Haas, con 108.
Equipos de F1 con pérdidas
Los elevados gastos contabilizados llevan a muchos de los equipos a incurrir en pérdidas. Es el caso de Ferrari, del grupo FCA, Force India, McLaren, Mercedes y Renault.
Las inversiones de este año han ido dirigidas a nuevas mejoras de la aerodinámca y de los motores, además de incorporar cambios obligatorios por la nueva regulación de la Fórmula 1. Los monoplazas han tenido que ampliar la anchura del alerón delantero de 1,8 a dos metros, mientras que el posterior es 10 centímetros más ancho y siete centímetros más alto.
Mejoras en los monoplazas de F1
Los equipos han introducido algunas modificaciones de gran calado. El SF90 que conduce Sebastian Vettel ha aumentado la distancia entre ejes en 2,5 centímetros moviendo hacia atrás el eje trasero. A pesar de ello, el Mercedes W10 de Lewis Hamilton tiene una distancia más amplia entre ejes, lo que mejora la carga aerodinámica, Además, las pruebas en el túnel del viento han permitido perfeccionar las superficies.
Esas mejoras introducidas por los equipos de Fórmula 1 y las abultadas inversiones se pondrán a prueba a partir del Gran Premio de Australia en Melbourne en la competición en manos de Liberty Media, un conglomerado con una facturación de 4.500 millones de dólares y un beneficio de 178 millones. El grupo norteamericano se ha convertido en un duro negociador con los circuitos que quieren albergar una carrera de Fórmula 1, como el de Barcelona Montmeló, que requiere de la ayuda pública para afrontar el pago del canon exigido.