Nuestro invitado, Eduardo Ramírez, lleva casi 17 años en el Centro de Diseño de Hyundai en Russelsheim (Alemania), ahora como máximo responsable de un equipo de 90 personas. No es la primera vez que nos encontramos y hablamos de diseño. En esta ocasión para conocer los secretos del nuevo Hyundai Santa Fe.
Profesionalmente, y tras pasar por el Royal College, estuvo cuatro años en Audi, donde coincidió con Peter Schreyer -el gran valedor de la evolución del Diseño en Kia y luego máximo responsable de Diseño de esta marca y de Hyundai a la vez-. Posteriormente, nueve años en General Motors Europe, donde vivió la etapa final de Saab, antes de recalar en 2007 en Hyundai.
Eduardo Ramírez, jefe de diseño de Hyundai en Europa
¿No son muchos años en una misma marca en un mundo con tanto cambio como el del diseño?, pregunto. Eduardo Ramírez me responde que piensa que esto es así porque Hyundai y él tienen el mismo espíritu, la misma mentalidad para mirar el futuro, la misma ambición por mejorar… Hemos hablado de Peter Schreyer pero su actual gran jefe es Luc Donckerwolke, al que conocimos hace mucho tiempo en Seat. Eduardo destaca de Donckerwolke su pasión a la hora de trabajar el diseño: "Es el más forofo y eso lo transmite al equipo”
Al volante del Hyundai Santa Fe
Mientras el máximo responsable de diseño de Hyundai conduce por vez primera el Santa Fe, ataco preguntando a Eduardo qué les dice a todos aquellos que hablan del Santa Fe como de un Defender “pixelado”, este adjetivo en referencia a su lenguaje lumínico. Eduardo es tranquilo, reflexivo, y no rehúye la pregunta: "Es un orgullo que nos comparen con una marca y modelo icónicos. Ya con referencia a los píxeles, es cierto que es lenguaje de nuestros eléctricos como recordatorio a la tecnología nostálgica, pero aquí no buscamos ese efecto píxel, buscamos gráficas fáciles de reconocer tanto delante como detrás gracias a nuestra H".
Es verdad que el nuevo Santa Fe te puede recordar a algún Land/Range Rover, del mismo modo que algún compañero, con acierto, alude a este modelo como el más americano de la marca, algo que sin duda gustará a otro buen amigo, José Muñoz, vicepresidente de Hyundai y máximo responsable para Norteamérica.
Diseño inicial del nuevo Hyundai Santa Fe
Pero volvamos a nuestro Hyundai Santa Fe y que hablen los que saben, en este caso Eduardo: "Hemos buscado superficies simples, con ángulos y aristas potentes para dar sensación de robustez, para llevarnos a un territorio que al ojo puede mutar de SUV a TT".
Siempre me gusta preguntar a un diseñador, a un creador, por la vista más atractiva de un coche: "Me quedo con el tres cuartos trasero". Le digo que llevo ya unas pocas entrevistas a diseñadores y todos coinciden siempre que les hago esta pregunta con la misma vista, ese tres cuartos posterior. Se sorprende Eduardo y me apostilla que siempre esa vista es la que mejor define un coche pero que en el caso del Santa Fe, también le encanta la vista lateral, con un frontal corto y una trasera larga y cortada muy vertical, con un techo flotante que alarga el conjunto dando sensación de ser mucho más grande de lo que es.
Los logros del diseño
Lo que sí nos recalca el máximo responsable de Diseño en Hyundai Europa es que cada coche tiene una personalidad distinta, es diferente a sus hermanos y lo ejemplifica con que entre un Ioniq 5 y un Kona no hay una línea igual… Posteriormente nos lo ejemplifica con las piezas de un tablero de ajedrez, cada una con una funcionalidad y una forma y donde el Santa Fe sería ahora el rey. Pero, entonces, ¿cuál es el Hyundai más auténtico en estos momentos en base a lo que es y quiere ser la marca? Ramírez se decanta por el Tucson, "un coche atrevido, que sorprendió cuando salió al mercado en la actual generación, que se ha convertido en clave en todos los países…".
Eduardo Ramírez, diseñador del Hyundai Kona / T.F.
Presume Eduardo de que, pese a esas formas tan cúbicas y la sensación de voluminosidad, el Cx del coche es sorprendente, 0,29, y esto es fruto del trabajo funcional del diseño donde destaca el trabajo en lateral, en techo, y en el portón trasero para que las turbulencias se formen lo más lejos posible.
En el interior, líneas horizontales, se busca ensanchar visualmente el habitáculo y dar mayor sensación de espacio. Y esas H exteriores, lumínicas, también las encontramos en el salpicadero. Esa sensación de espacio ha presidido el coche desde su concepción. Eduardo nos dice que los primeros bocetos mostraban el coche desde atrás con el portón abierto. "Esto fue fruto de que el coche empezó a diseñarse durante el confinamiento y el deseo de los diseñadores era de salir, de conectar con la naturaleza, de disfrutar de espacios amplios".
Le pregunto si la adaptación del Casper al europeo Hyundai Inster tiene ADN de su equipo de trabajo y me dice que no, aunque me barrunta que hay espacio para algún modelo más en esa línea con lo que estaremos alerta para ver lo que nos ofrece 100% BEV, ahora sí con diseño europeo, el equipo de Eduardo Ramírez, entre los 3,8 metros del Inster y los 4,35 metros del Kona eléctrico.
El diseño de los competidores chinos
Mucho estamos hablando de coches chinos, pero ¿qué opina Eduardo Ramírez del diseño chino? Nuestro entrevistado destaca que son marcas que están creando con total libertad, sin tradición ni trabas, y esto permite encontrar soluciones sorprendentes en estilo, materiales, calidades y tecnología. Ellos, incluso desde Europa, hay veces que participan en proyectos para el mercado chino cuando se piden propuestas y pese a que en China, Hyundai tenga dos centros de diseño. E igual que piensan "en chino", otras veces toca pensar en indio o en indonesio, mercados cada vez más importantes.
Obligatorio hablar con Eduardo de la utilización de la inteligencia artificial en el diseño automovilístico. Su opinión es que las nuevas herramientas digitales "nos permiten ver y valorar más soluciones que antes. Eso sí, la primera idea, el primer boceto sigue siendo papel. Con la AI estamos aprendiendo y nos ayuda a ahorrar tiempo. Nos dejamos sorprender por la AI, como un pintor que tira pintura sobre un lienzo a ver qué ocurre”. También tengo que saber si ahora, como gestor de un equipo/proyectos, ha perdido tiempo de creatividad: "Ahora ya no boceto apenas, pero creo guiando al equipo y descubriendo ideas con potencial".
Termino mi viaje a bordo del nuevo Hyundai Santa Fe con mi probador de lujo. Mi última pregunta: ¿a qué diseñador automovilístico te gustaría haber conocido? No duda Eduardo: "A Harley J. Earl y a Bill Mitchell, máximos responsables de diseño en General Motors en la época dorada de la marca a mediados del siglo pasado. "Crecí con libros donde aparecían esos diseños que me hacían soñar, esos 'dream cars' fantásticos de los 50. Tuve la suerte de presentar incluso en sus cuarteles generales alguno de mis diseños”, termina Eduardo.