La nueva normalidad se está comportando de una forma muy volátil, como demuestra un nuevo descenso de las matriculaciones de vehículos en septiembre. Las ventas de coches bajaron un 13,5% en el mes pasado, una cifra peor de lo esperado por el sector, que confiaba en que el Plan Renove sirviera de tabla de salvación.
Septiembre ha dado un nuevo jarro de agua fría al sector del automóvil después deñ descenso de agosto y de un leve aumento en julio que no se ha consolidado. Las matriculaciones de turismos y todoterrenos en España cerraron el mes pasado con un volumen de 70.729 unidades, según los datos publicados por las asociaciones de fabricantes (Anfac), concesionarios (Faconauto) y vendedores (Ganvam). En los nueve primeros meses, el mercado automovilístico acumula unas matriculaciones de 595.435 unidades, un 38,3% menos que en el mismo periodo de 2019, cuando se vendieron 965.286 turismos.
Las compras de vehículos bajaron en todo tipo de compradores, aunque los particulares suavizaron la caída. Las matriculaciones a nombre de clientes particulares bajaron un 10,6% durante el mes de septiembre, hasta 36.555 unidades, y un 31,4% en el acumulado del año hasta el mes pasado, con un volumen de 298.804 unidades. Las entregas a empresas bajaron un 13,9% mensual, con 30.324 unidades, y un 32,7% desde enero, hasta 214.999 unidades, al tiempo que el canal de empresas alquiladoras recortó un 31,7% sus matriculaciones el mes pasado, con 3.850 unidades, y un 61,2% su cifra desde comienzo de año, hasta 81.632 unidades.
Potencial del Renove
"El Plan Renove aún tiene fondos suficientes para impulsar las ventas de cara al último trimestre y esperamos que la evolución del virus no frene aún más el mercado”, ha destacado Noemí Navas, directora de Comunicación de Anfac.
Para Raúl Morales, director de Comunicación de Faconauto, "la evolución no es buena, pero estamos aún en un volumen de matriculación que es mejor de lo previsto gracias en gran medida al efecto del Plan Renove 2020. Sin duda, ya está pesando el empeoramiento de la situación sanitaria y un nuevo retroceso en la confianza de los consumidores, que ven con recelo no sólo el presente sino también el futuro".
La esperanza de fabricantes y vendedores de vehículos es que no se agrave la incertidumbre, para lo que la prórroga de los ERTE puede contribuir a dar "cierta certidumbre al consumidor", según Tania Puche, portavoz de Ganvam.