Francia registró en marzo un total de 182.775 vehículos matriculados, una cifra que supone un espectacular incremento del 191,7 % respecto al mismo mes de 2020. Sin embargo, la comparación es engañosa ya que se hace con el primer mes de confinamiento por la pandemia de coronavirus, que cerró a cal y canto los concesionarios y provocó el desplome de las matriculaciones.
El Comité de Constructores Franceses de Automóviles (CCFA) explicó este jueves en un comunicado que en el conjunto del primer trimestre se matricularon 441.792 automóviles particulares, lo que significa un alza del 21,1 % respecto al mismo periodo del pasado año.
Crecimientos por marcas
En marzo todos los fabricantes tuvieron crecimientos interanuales espectaculares, en particular Volkswagen (+299,6 %, hasta 23.793 unidades), Daimler (262,7 %, a 6.446), Suzuki (689,7 %, hasta 2.614).
Los dos grupos franceses también mejoraron aunque de forma más suave al tener una cuota de mercado mucho mayor. Stellantis, que engloba las marcas de la antigua PSA y las del grupo Fiat, aumentó sus ventas un 215,6 %, hasta 64.466 unidades. El otro gran grupo francés, Renault, registró un incremento del 125,9 %, hasta 39.803 unidades.
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