El podio mundial de los fabricantes de automóviles está cada vez más competido. La pugna por la primera posición sigue siendo cosa de tres marcas, aunque la distancia entre ellas es cada vez más ajustada. El ranking actual está encabezado por Toyota, aunque seguida muy de cerca por Volkswagen y General Motors.
Toyota y el resto de marcas englobadas en el grupo japonés vendió 10,133 millones de vehículos en su último ejercicio fiscal, que acabó en marzo pasado. Después de superar la incertidumbre causada por el impacto público de las llamadas a revisión masivas, la marca presidida por Akio Toyoda logró un incremento de sus ventas en 2013 del 4,5%, lo que la convirtió en la compañía que mejoró más sus resultados comerciales.
A sólo 405.000 unidades de distancia se encuentra Volkswagen, que el año pasado vendió 9,728 millones de vehículos, los que supone un 4,1% más que en 2012. Esta progresión ha llevado al presidente del grupo alemán, Martin Winterkorn, a adelantar dos años, hasta el 2016, su objetivo de convertirse en el primer fabricante mundial de automóviles, para lo que tendrá que conseguir su vieja aspiración de superar a Toyota después de haber rebasado ya a General Motors.
GM ocupa el tercer puesto mundial con 9,714 millones de vehículos, un 4% más que en 2012, y sufre la sombra de los posibles efectos en las ventas en Estados Unidos de la llamada a revisión masiva anunciada y de los pleitos emprendidos por algunas muertes en accidentes atribuidos al fallo en el sistema de encendido del motor.