El grupo Seat, que posee las marcas Seat y Cupra, cerró el ejercicio 2024 con cifras históricas de beneficio y facturación. Ambas marcas lograron un beneficio operativo de 633 millones de euros, lo que supone un incremento del 1,3 % respecto a 2023. Asimismo, la facturación alcanzó los 14.530 millones de euros, un 1,4 % más que el año anterior. La mejora de Seat, que desafía el convulso contexto de los mercados automovilísticos, contrasta con la caída del resukltado del Grupo Volkswagen.
El crecimiento de Seat y Cupra también se reflejó en las ventas, que aumentaron un 5,9 % en 2024 hasta las 637.000 unidades, incluyendo el modelo A1 fabricado para Audi. En cuanto a entregas de las marcas Seat y Cupra, el avance fue del 7,5 %, con un total de 558.159 unidades puestas en manos de los clientes. Modelos como el Formentor de Cupra y el Ibiza de Seat fueron los más exitosos del año.
Rentabilidad estancada
Cupra lanzó al mercado en 2024 nuevos modelos eléctricos como el Tavascan, el Terramar y el renovado León, consolidando su apuesta por la movilidad sostenible. Por su parte, Seat tiene previsto actualizar en 2025 los modelos Ibiza y Arona con nuevos elementos de diseño y tecnología avanzada.
El margen de rentabilidad del grupo Seat se mantuvo extancado en el 4,4%, el mismo porcentaje que supuso el resultado respecto a la facuración de 2023. La mejora de este indicador se ha convertido en una cuestión estratégica para acometer las futuras inversiones, según ha advertido en reiteradas ocasiones Wayne Griffiths, CEO del grupo español.
Revisión de la estrategia en EEUU
A pesar de estos resultados positivos, la expansión de Cupra en el mercado estadounidense podría verse afectada por la política de aranceles del presidente Donald Trump. Oliver Blume, consejero delegado del grupo Volkswagen, indicó que la empresa está reevaluando sus planes para la marca en EE.UU., donde inicialmente se había planteado una entrada mediante exportaciones. "Consideramos que el mercado estadounidense es muy atractivo para Cupra, pero tenemos que considerar cómo cambian las condiciones allí", afirmó Blume en la presentación de resultados.
Volkswagen estudiará cómo evoluciona la relación entre los vehículos de combustión y los eléctricos en EE.UU. antes de tomar decisiones definitivas sobre Cupra en ese mercado. Una de las opciones que baraja el grupo es la posibilidad de producir en la región en lugar de exportar. Volkswagen ya cuenta con una fábrica en Chattanooga, Tennessee, donde ensambla el todocamino eléctrico ID.4, así como con una importante planta en Puebla, México, donde fabrica modelos como el Jetta, el Tiguan y el Taos. Sin embargo, los cambios en las políticas arancelarias podrían impactar en los costes y viabilidad de la estrategia original.
Resultados del grupo Volkswagen
El grupo Volkswagen en su conjunto obtuvo un beneficio operativo de 19.060 millones de euros en 2024, un 15,4 % menos que el año anterior, debido al aumento de costes fijos y los gastos extraordinarios de reestructuración. A pesar de ello, Blume calificó los resultados como "sólidos" dadas las circunstancias del mercado.
De cara al futuro, Volkswagen planea aumentar su facturación un 5 % en 2025 y mejorar su margen de rentabilidad. Una de sus estrategias clave es hacer la movilidad eléctrica más asequible, con el reciente lanzamiento del ID. Every1, un modelo que se producirá en Portugal a partir de 2027 con un precio inicial de 20.000 euros.
En este contexto de transformación del sector, Seat y Cupra continúan consolidándose como piezas clave dentro del grupo Volkswagen, aunque con la mirada puesta en cómo evolucionan los mercados internacionales y las políticas comerciales.