Rolls-Royce volvió a batir en 2023 su propio récord. Vendió y entregó 6.032 vehícilos, la cifra más alta de sus 119 años de historia y 11 unidades más que en 2022. Pueden parecer pocas, pero en fabricar un Rolls-Royce se tarda entre cinco y once días, aunque algunas unidades pueden exigir hasta seis meses de trabajo. Eso sí, el precio está en consonancia con el esfuerzo.


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Chris Brownridge, CEO de Rolls-Royce Motor Cars desde el pasado 1 de diciembre, destacó que asume el cargo “en una posición extremadamente afortunada, un negocio con buena salud, bases sólidas y una estrategia clara hacia el crecimiento y un equipo enfocado y dedicado”.

Futuros modelos de Rolls-Royce

El nuevo CEO destacó que Rolls-Royce nunca será un negocio impulsado por el volumen. “Como marca de lujo, su objetivo es cumplir y superar las expectativas de sus clientes construyendo no sólo "el mejor coche del mundo", sino el coche que mejor los represente a ellos y a su personalidad”. El Cullinan fue el Rolls-Royce más vendido en todo el mundo, seguido de Ghost, mientras el Phantom sigue siendo la cima de la marca.

Aunque en la primera mitad del año se terminó, como estaba previsto, la producción de los Rolls-Royce Wraith, el coupé que se lanzó en 2013 y el cabrio Dawn de 2015, que suponen los últimos V12 fabricados por RR. En el cuarto trimestre comenzaron  las primeras entregas de Rolls-Royce Spectre, el primer modelo 100% eléctrico de la marca que abre el camino a un nuevo futuro. A finales de 2030 la marca prevé producir sólo vehículos totalmente eléctricos. 

Inversiones industriales

Para cumplir ese objetivo acaba de anunciar una nueva inversión, la más importante desde que se inauguró esta nueva planta en 2003 para ampliar y modernizar las instalaciones industriales. Estos planes mejorarán y ampliarán las capacidades de Bespoke y Coachbuild y apoyar la producción de la futura cartera de productos totalmente eléctricos.

Para celebrar los 20 años de la fábrica de Goodwood, Rolls-Royce encargó un estudio sobre el impacto económico de la marca. Según este trabajo, su contribución a la economía del Reino Unido ha sido desde 2003 de más de 4.000 millones de libras y actualmente se sitúa en más de 500 millones de libras anuales. La compañía emplea a 2.500 personas y el pasado año creó 180 nuevos puestos de trabajo.