El futuro del impuesto de matricualción se decide en las Cortes. Después de la aprobación en el Congreso de una enmienda por toda la oposición para rebajar el importe del gravamen, el Senado tiene la palabra. La Comisión de Hacienda de la Cámara Alta ha debatido este jueves 17 de junio el proyecto de ley en el que se incluye la rebaja del impuesto, que de momento sigue adelante ante el intento del PSOE y Unidas Podemos de buscar un acuerdo de cara al trámite final de aprobación en el pleno.
En el debate, los grupos del PSOE y de Izquierda Confederal han retirado provisionalmente de la votación sendas enmiendas en las que se pedía parar la rebaja del impuesto de matriculación ante el peligro de que fueran tumbadas. Los partidos del Gobierno harán un último intento en el pleno para el que están trabajando en una enmienda transaccional con grupos que aprobaron forzar al Ejecutivo a bajar el tributo. De momento, el texto de la ley que ha sido aprobado en la Comisión de Hacienda mantiene la reconsideración de los valores fiscales de CO2 para dar marcha atrás a la subida del impuesto desde enero.
Los partidos del Gobierno no lo tienen fácil para frenar la rebaja del tributo. De los 265 senadores de la Cámara alta, el PSOE tiene 112 a los que puede sumar en la votación de su enmienda los seis de Izquierda Confederal. Por tanto, sumaría 118 de los 265 senadores. Si todos los partidos de la oposición en el Senado, desde el PP a los independentistas, votan igual que en el Congreso, las enmiendas socialista y de la izquierda saldrán rechazadas por 142 votos en contra. En la Comisión de Hacienda se mantienen esas proporciones.
Negociación in extremis
El sindicato UGT había pedido a los partidos del Gobierno que cedan y permitan rebajar el impuesto de matriculación, y más teniendo en cuenta que necesitan algún partido aliado para frenar el cambio al no tner mayoría. La federación de industria UGT FICA propone una tregua en la subida del impuesto de matriculación hasta que las ventas de coches en España recuperen el nivel anterior a la pandemia. El mercado se encuentra actualmente alrededor de un 40% por debajo todavía pese a la progresiva recuperación.
UGT FICA abre también la puerta a la posibilidad de una enmienda transaccional con una solución intermedia: "Consideramos más oportuno que el Gobierno opte por paralizar la subida del impuesto temporalmente o, en su defecto, por ampliar los tramos de las emisiones, a la espera de que el sector se recupere y alcance, como mínimo, los niveles de matriculación y producción prepandemia. Lo contrario será un error estratégico de consecuencias muy negativas para la industria automovilística en general y para el empleo en particular".
Argumentos contra la rebaja
De las 178 enmiendas presentadas al proyecto de ley de medidas de prevención y lucha contra el fraude fiscal, había dos que no tenía relación directa con el cuerpo de esa norma, sino con la polémica disposición adicional quinta que fue forzada por todos los partidos de la oposición en una insólita alianza que va de VOX a los independentistas pasando por el PP y Ciudadaos.
Todos los partidos menos PSOE y Unidas Podemos aprobaron una enmienda presentada por el PdeCat para neutralizar la subida del impuesto de matriculación. La forma de hacerlo es elevar los tramos que prevé el impuesto, que ahora parten en 120 gramos de CO2 y que con esa enmienda pasan a 145 gramos. De esa manera, quedaría sin efecto fiscal la subida legal de emisiones por la aplicación del protocolo WLTP en enero de 2021.
Tanto el PSOE como Izquierda Confederal, que engloba las agrupaciones de Unidas Podemos, pedían en sendas eniendas la supresión de la disposición transitoria en la que la oposición lescoló un gol. La enmienda socialista es muy sintética y defiende los argumento medioambientales para mantener la subida del impuesto.
Enmienda transaccional
La enmienda de Izquierda Confederal es más extensa en sus argumentos. "El bloqueo a este sistema, mediante la citada enmienda introducida en el Congreso, implica que España no hará efectiva la nueva categorización europea de vehículos según sus emisiones reales. Ello supone no penalizar en el impuesto de matriculación la compra de vehículos más dañinos para el medio ambiente y la salud de los ciudadanos, además de ir en contra de los objetivos ambientales y climáticos".
Tanto el PSOE como Unidas Podemos no tienen en cuenta que en otros países europeos han neutralizado el efecto fiscal de la subida de emisiones por el protocolo WLTP, que hace pruebas más realistas.