En el mundo de la moda, la relojería o el automóvil hay marcas que alcanzan la categoría de mito por algún detalle pese a no ser ni muy populares ni líderes de ventas. Ese es el caso de Subaru, deseada por un puñado de fieles fans en todo el mundo por sus indudables peculiaridades como el motor tipo bóxer, como el que usa Porsche, más plano, y por haber sido pionera en dotar de tracción integral a todos sus modelos incluidos los turismos. En Coche Global hemos tenido la oportunidad de probar su SUV más exitosos e icónico, el Subaru Forester.

Valoración del Subaru Forester MY22: diseño 8,5; interior 8,8; motor  8,9; conducción 8,0; global 8,55.

La marca japonesa, fundada en 1953, está actualmente controlada por el grupo industrial Subaru Corporation, que hasta 2017 se llamaba Fuji Heavy Industries, y que posee el 80% del capital. El 20% restante es propiedad de Toyota. Entre 1999 y 2005 el 20% estuvo en manos de la estadounidense General Motors.

En el siglo XXI, la presencia de Toyota en su capital supone un refuerzo en el proceso de electrificación. Subaru desvelará a finales de abril su primer modelo 100% eléctrico, el Solterra, cuyas primeras unidades se entregarán a los clientes a finales de año. Además, la marca de las estrellas (tiene seis en su logo y el nombre en japonés hace referencia a las estrellas de las pléyades) será el referente en los SUV eléctricos de Toyota aprovechando su experiencia.

26 años de Subaru Forester

Antes de entrar en esa nueva era, Subaru lanza en España el renovado Forester, la edición 2022 de un SUV que nació hace ya 25 años y del que se han vendido en todo el mudo 4,5 millones de unidades desde 1997 y 350.000 en España. Su veteranía no lo ha hecho más viejo, sino más experimentado e incluso atractivo. Más seguro gracias a nuevos sistemas de ayuda a la conducción, ligeramente más largo, con algunos elementos ingeniosos, pero igual de fiable en recorridos off road y manteniendo inalterable su elegante estilo clásico.

Construido sobre una plataforma de acero flexible que garantiza su seguridad en caso de impactos, el nuevo Forester es ligeramente más largo que su antecesor, 4,64 metros en total, 1,5 centímetros más, aunque mantiene una distancia entre ejes de 2,67 metros y la anchura de 1,81. Ese crecimiento le permite mejorar el ángulo de ataque. que es de 21,4º, superando un grado a su antecesor.

La altura libre al suelo de 22 centímetros no dificulta el acceso al habitáculo y da una estupenda visión desde el puesto de conducción, pero también desde el resto de posiciones. Entrar en el Forester es fácil y una vez dentro, además de resultar cómodo, con un asiento fácilmente ajustable a cualquier envergadura transmite esa sensación de calidad de los muebles y los edificios clásicos. Buenos materiales, buenas terminaciones y calidad en 360 grados. El interior mantiene ese aspecto de los buenos coches premium en los que la tecnología no desentona porque está bien integrada.

Sensación de deportividad

El estilo exterior es el de siempre, sólido y confiable, pero se ha modernizado con una nueva parrilla frontal, ópticas más pequeñas, un nuevo protector inferior de estilo más tecnológico. Puede calzar llantas de 17 o 18 pulgadas y para el exterior se pueden elegir siete colores de carrocería, tres de ellos nuevos.

En el interior combina tapicerías oscuras con piezas metálicas en las salidas del aire o los marcos de los mandos y pespuntes más claros. El conjunto transmite sensación de deportividad. El habitáculo no es nada oscuro porque recibe mucha luz exterior de las amplias zonas acristaladas e incluso del techo panorámico que tiene una cubierta interior para evitar el calor del verano.

Par el interior se puede elegir entre una tapicería textil y dos curos nappa uno negro y otro que se combina con marrón y que da más luminosidad al habitáculo. Los cueros también son lavables, no en vano se trata de un modelo de vocación campera.

Motor del Subaru Forester

El Forester se ofrece con un único motor bóxer de gasolina con cuatro cilindros horizontalmente opuestos de 150 caballos y una hibridación ligera con un motor eléctrico de 12,3 kW, equivalente a 16,7 caballos, que está integrado en la caja de cambios automática de siete velocidades. El embrague es el que acopla y desacopla el motor eléctrico con el fin de reducir el consumo. El sistema incluye una batería de iones de litio con una capacidad de 0,6 kWh que incluso permite circular en modo 100% eléctrico. Con este sistema además del stop&star, filtro de partículas y recirculación de gases de escape tiene etiqueta ECO de la DGT.

En autovía tiene un comportamiento tranquilo, pero también ágil, con una rápida respuesta del motor cuando es necesario, por ejemplo, en un adelantamiento. En curva se nota cierta inercia de la carrocería, pero es suave y no resulta molesta. Lo metí en pista y se nota que se mueve en su territorio natural con un estupendo aplomo pese a las irregularidades del firme.

Admite rápidas velocidades, pero el motor responde con un mayor ruido y el consumo, obviamente, sube. De media, Subaru da un consumo de 8,1 l/100 km. Como mejor se comporta es en una conducción suave, tranquila y con aplomo.

Dos pantallas

En la consola central destacan las dos pantallas. Una superior estrecha en la que se indican las actuaciones sobre la climatización, temperaturas o datos mecánicos, y otra inferior cuadrada en la que se muestran los de navegación, teléfono o equipo de sonido. Este Subaru incorpora Apple Carplay y Android Auto.

Entre las novedades de esta nueva versión destacan el espejo retrovisor antideslumbrante, dos ganchos en la parte superior del maletero, que tiene 509 litros de capacidad, un mejorado control de descenso, prevención de salida de carril que te reubica en caso de despiste, control de crucero adaptativo que funciona incluso en curvas cerradas o frenada precolisión.

Subaru ha marcado como una de sus prioridades la seguridad y eso se nota en los equipamientos con los que dota a sus modelos con el objetivo reducir a cero accidentes con víctimas en 203 y este modelo tiene la máxima puntuación en las pruebas euroNcap.

El nuevo Subaru Forester se comercializa ya en tres niveles de equipamiento, desde 35.400 a 39.900 euros. Subaru, que está importada y distribuida en España por Astara (la antigua Bergé Auto), prevé vender este año 500 unidades de este modelo. El pasado año matriculó un total de 1.610 unidades, incluidos el XV, Impreza, Outback, un 3,2% más que en 2020 pero lejos de las 2.400 de años anteriores.