Polestar crece con la ampliación de la gama de modelos eléctricos y también en el espacio que necesita para mostrarlos a sus clientes. La marca llegó a España con una primera embajada en el paseo de Gràcia de Barcelona, un espacio que se ha quedado pequeño y que ha llevado a la firma a trasladarse a unos 100 metros en otro punto en la capital catalana, en la calle Rosseló entre Rambla de Catalunya y Balmes.
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En los 240 metros cuadrados que ocupa ahora Polestar en la calle Rosselló, que anteriormente albergaba una de las numerosas oficinas bancarias víctimas de la crisis y la digitalización, se pueden ver por ahora dos modelos. Son el Polestar 2, con el que se introdujo en el mercado, y el nuevo 3, un SUV grande que actúa como estandarte de gama alta. Pero el nuevo Polestar 4, un todocamino con silueta coupé, está a punto de llegar tras el inicio del periodo de venta a partir del 31 de enero. Después llegará una berlina deportiva.
Más espacio y menos turistas
La apertura del nuevo Space de Polestar en Barcelona ha tenido lugar dos años y medio después de la llegada al paseo de Gràcia. "El primer Space se nos ha quedado pequeño", afirmó Stéphen Le Guevel, director de Polestar en España.
Pero la búsqueda de más espacio no es el único motivo de la mudanza de Polestar en Barcelona. Tal como aseguró José Luis Porté, consejero delegado de los concesionarios Ronda 15 de Volvo en Barcelona -socio en la inversión y la gestión de los espacios de Polestar-, esperan captar más clientes potenciales residentes en Barcelona y en su área y evitar la atracción de turistas que ejercía el anterior punto en el paseo de Gràcia, que además era más caro.
Aumento de las ventas
Con los nuevos lanzamientos, Polestar prepara también la apertura de otros puntos de venta y de experiencia de la marca tras los dos de Barcelona (en la calle Rosselló y la Vía Augusta) y dos más en Madrid (Velázquez y avenida de Burgos). El próximo que se abrirá será en Valencia, pero después vendrán otros para los que la marca tiene una lista de grandes ciudades en las que ahora distribuye sus vehículos a través de la red de Volvo (controlada por la china Geely), empresa impulsora de Polestar. "En 2024 entramos en una nueva fase acelerando en todos los aspectos", ha afirmado Stéphen Le Guevel.
La marca sueca Polestar (con fábricas en China y EEUU) vendió en 2023 un total de 54.600 automóviles, un 6% más que en 2022. De esa cifra, 665 unidades del Polestar correspondieron a España, lo que supone un salto del 248%.