China ha roto su racha al alza de las ventas de automóviles debido a la nueva ola de coronavirus, que ha llevado al país a aplicar confinamientos en áreas como Shanghai. Las ventas de coches en China cayeron un 11,7% en marzo con respecto al año anterior al registrar 2,23 millones de matriculaciones, lo que supone el primer descenso del mercado automovilístico en tres meses, según la Asociación China de Fabricantes de Automóviles.


Participa en el Barómetro Auto Mobility Trends 2022, que evalúa el impacto de la crisis de los microchips y la guerra de Ucrania en la movilidad y la automoción. 


A pesar del descenso general del mercado, las ventas de vehículos de energías alternativas, que incluyen los eléctricos e híbridos, se duplicaron en marzo hasta llegar 484.000 vehículos. Pero esa cifra también muestra una desaceleración importante del ritmo de crecimiento de la movilidad electrificada. 

Camas junto a la fábrica

Con los confinamientos manteniéndose con la misma intensidad, la patronal ya ha avanzado que la "grave" situación de la pandemia no permite ver mejoras del mercado automovilístico en abril. Por ese motivo, los fabricantes han pedido al Gobierno que ponga en marcha medidas de apoyo similares a las de la primera ola de covid en 2020 para incentivar las ventas, entre las que se incluye la rebaja del impuesto de matriculación.

Los nuevos confinamientos ordenados han tenido como consecuencia el cierre de de varias factorías de vehículos, entre las que se incluyen las de Tesla y Volkswagen, mientras que las de General Motors y SAIC intentaban evitar el parón mediante la creación de una burbuja con los empleados durmiendo junto a sus puestos de trabajo. 

Además, los organizadores del Salón del Automóvil de Pekín han anunciado un aplazamiento para trasladar su celebración, que estaba prevista en abril, a una nueva fecha por determinar.