Toyota se ha convertido en otra víctima del celo inspector del Gobierno japonés con los fabricantes automovilísticos. La marca ha anunciado la suspensión de la producción y entregas de tres modelos fabricados en Japón debido a nuevas irregularidades destapadas en pruebas de seguridad. Además, han aflorado irregularidades en las homologaciones de modelos de Honda, Suzuki, Mazda y Yamaha que también han sido paralizados. 


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Los modelos afectados por los nuevos problemas detectados de Toyota son el Corolla Fielder, el Corolla Axio y el Yaris Cross, según explicó Toyota en un comunicado publicado. La investigación ha determinado que Toyota había presentando datos falsificados sobre las pruebas de protección de peatones para los tres modelos afectados, además de haber cometido fraude en las pruebas de choque de los modelos Crown, Isis, Sienta y RX, que ya no están en el mercado.

Disculpas de Toyota

Pese al anuncio de la parada de producción, Toyota ha intentado tranquilizar a sus clientes. "Tras verificaciones internas exhaustivas de los vehículos afectados, incluidos aquellos que ya no están en producción, podemos confirmar que no hay problemas de rendimiento que contravengan las leyes y regulaciones", indicó el fabricante japonés y líder mundial de la automoción. 

El presidente de Toyota. Akio Toyoda, ha pedidos "sinceras disculpas". "Esto es algo que sacudirá los cimientos del sistema de certificación y, como fabricante de automóviles, nunca deberíamos hacer eso", ha asegurado el veterano directivo.  

Problemas en Mazda, Honda, Suzuki y Yamaha

Mazda habría falsificado los resultados del software de control de motor para dos modelos en producción, así como de los test de choque de tres modelos en el pasado, según el informe gubernamental. Las irregularidades de Yamaha afectan a las pruebas de ruido de un modelo actual, hechas en condiciones inadecuadas, así como para dos modelos anteriormente producidos, mientras que las falsificaciones de Honda habrían sido en este mismo sentido para 22 modelos antiguos. Suzuk habría falsificado informes de pruebas en el sistema de frenos de un modelo que no se fabrica en la actualidad.

Las autoridades han ordenado la suspensión inmediata de los envíos de los vehículos afectados y realizará inspecciones 'in situ' para confirmar los hechos que rodean a las irregularidades, cometidas a la hora de solicitar las certificaciones pertinentes del Gobierno. "Los actos fraudulentos en las solicitudes de certificación socavan la confianza de los usuarios y los cimientos del sistema de certificación de automóviles, y es sumamente lamentable que haya salido a la luz otro acto fraudulento", dijo el ministerio.

Inspección a 85 empresas

Ante la proliferación de problemas relacionados con las homologaciones de modelos de algunas marcas, el Gobierno japonés ordenó a 85 empresas que revisaran sus procedimientos por si había otros problemas o fraudes. Fruto de esas inspecciones se han descubierto hasta finales de mayo varias irregularidades en Toyota, Mazda, Yamaha, Honda y Suzuki.

El Ministerio japonés de Tierra, Infraestructura, Transporte y Turismo ha publicado un informe sobre la situación de las certificaciones en la industria de automoción del país después de las irregularidades destapadas en Daihatsu Motor y Toyota Industries Corporation, filiales de Toyota.