Con el nuevo Renault Megane E-Tech Electric, la marca quiere abrir una nueva era de la electrificación. Unos meses antes de su lanzamiento comercial, hemos podido someter a prueba esta nueva berlina 100% eléctrica para la sección Car Review & Rating de Coche Global.  

La tecnología de propulsión en la que se basa el Megane E-Tech Electric no es nueva para la marca francesa. Acumula más de 10 años de experiencia. De hecho, fue una de las pioneras cuando su entonces presidente, Carlos Ghosn, aceptó el reto que lanzó Israel de hacer un vehículo eléctrico popular. El resultado fue el Fluence Z.E. (Zero Emission) en 2011, al que le siguieron el Kangoo Z.E. y el Twizy. En 2019 llegó el Zoe Z.E., ya concebido como eléctrico, y luego la gama de comerciales con el Master y el nuevo Kangoo y recientemente el Twingo E-Tech eléctrico.


Valoración del Renault Megane E-Tech Electric: diseño 8,5; interior 8,7: motor 8,8; conducción 8,0; global 8,5.


Con el paso de los años fue aumentando la autonomía, que ya llega a los 400 km y cambió la denominación. Renault ha eliminado el Z.E. por E-Tech, que hace referencia a una tecnología propia. Pero como también la usan los híbridos e híbridos enchufables de la marca añaden la especificación Electric para indicar que es un eléctrico puro. Por eso el nuevo Megane E-Tech Electric tiene nombre y dos apellidos.

Se trata de un modelo nuevo, concebido para ser un eléctrico puro y nacido para revolucionar este segmento. Aunque ya se pueden hacer pedidos las primeras empezarán a circular por la calle el próximo mes de junio. Con dos potencias de motor (130 y 220 caballos), baterías con dos niveles de capacidad -40 y 60 kWh, 300 y 450 km de autonomía- y cuatro terminaciones tiene un precio entre 35.200 y 47.700 euros.

Las terminaciones Equilibre, Evolution, Tecno e Ionic establecen diferentes niveles de equipamiento, pero a los elementos de serie, ya muy amplios, se le pueden añadir después diferentes paquetes.

Dimensiones del Megane eléctrico

Del Megane berlina toma un aire de familia en las líneas exteriores que lo hace reconocible, pero el nuevo eléctrico de Renault es completamente diferente por dentro, pero también por fuera. Está construido sobre la plataforma CMF-EV de la Alianza, específica para los modelos 100% eléctricos, y la menor dimensión del motor y de los elementos mecánicos condiciona su arquitectura. Las baterías están situadas bajo el piso, entre los ejes y son un nuevo desarrollo del grupo francés. Pese a su ligereza, 395 kilos, y fineza, 110 mm de altura, contribuyen a bajar el centro de gravedad del vehículo y a su estabilidad.

El Megane E-Tech Electric mide 4,19 metros de largo, es 16 centímetros más corto que la berlina, pero tiene una batalla más grande, 2,68 metros, frente a 2,66 los otros Megane. Es más estrecho, 1,76 metros y su altura es de 1,5 metros. Las ruedas están situadas en los extremos de la carrocería y son muy grandes, 20 pulgadas, lo que marca su estilo. El resultado es un coche con mucho espacio interior y un maletero de 440 litros que se puede ampliar abatiendo los asientos traseros. Bajo el piso tiene una caja de 32 litros para guardar los cables de carga. Una buena solución para que no molesten y estén tirados en el maletero.

No tiene una parrilla abierta pero sí unos difusores de aire en los laterales inferiores frontales con forma de flecha que le dan un aspecto muy personal y que en algunas terminaciones es de color dorado. Estrena el nuevo logo de Renault, el rombo revisado en modo siglo XXI, con líneas más anchas y planas que campa en el morro, el centro del volante o las llantas de las ruedas. Otro elemento nuevo y personal son las manetas exteriores de apertura de las puertas que están integradas en la carrocería y se despliegan al abrir el coche. Este eléctrico, de cinco puertas y cinco plazas es sencillo de conducir, pero incluye tecnologías innovadoras. El modelo y la plataforma que utiliza han supuesto 300 nuevas patentes. 

Opciones de motorización

El motor eléctrico que utiliza este modelo es nuevo. Se trata de un propulsor síncrono que no utiliza tierras raras y que, a diferencia del que equipa el Zoe con cuatro polos, este tiene ocho. El enfriamiento es líquido, no por aire. El motor se fabrica en Cleon (Francia) para Renault y en Japón para Nissan. 

Como ya avanzamos se podrá optar entre dos potencias del motor. El básico tiene 96 kW, equivalente a unos 130 caballos, y con un par motor máximo d 250 Nm, disponibles desde el arranque. El otro tiene 160 kW(unos 220 caballos), con un par máximo de 300 Nm. Tiene también un nuevo sistema de recuperación de energía en las frenadas que consigue, según Renault, aumentar hasta un 10% la autonomía. 

También se podrá escoger entre dos paquetes de baterías que dan nombre a las versiones: EV 40 con 40 kWh, lo que supone una autonomía de unos 300 km y EV60 de 60 kWh y hasta 450 km de autonomía. Se podrá optar por cuatro diferentes alternativas de recarga (estándar, boost, super y optimum) al adquirir el modelo. Renault reconoce que es una opción muy amplia, pero prefiere que sea el mercado o los compradores los que elijan la más adecuada a sus necesidades.

Standard charge, recarga con corriente alterna de 7kW, sólo está disponible en la versión EV40. La super charge se puede cargar con red de corriente alterna o continua de 130 kW. Optimum charge permite 130 kW y 22 kW y boost charge, que aún no está disponible, permitirá a EV40 recargar con corriente continua a 85 kW y alterna a 22 kW.

El Megane por dentro

Al entrar en este nuevo Megane eléctrico nos encontramos con un habitáculo que da sensación de espacio y unos asientos mullidos y confortables. Las tapicerías de tela proceden de materiales reciclados pro también hay opciones de cuero.

En las versiones con ajuste eléctrico cada cambio que realizamos en el asiento en la pantalla central nos pregunta si queremos guardarlo, algo muy práctico porque en los modelos que permiten ajustes para diferentes conductores nunca sabes en que letra está memorizado el tuyo y porque en función de los zapatos hay días que puede ser diferente la proximidad a los pedales.

La palanca del cambio está detrás del volante en la columna de la dirección. Es pequeña y muy similar a la de los modelos Mercedes con sólo cuatro posiciones: P, N, D y R. esta ubicación deja un gran hueco entre las dos plazas delanteras, desde la parte inferior del salpicadero y hasta la consola central. Cabe un bolso o una bolsa grande que sea necesario tener a mano.

Retrovisor digital

El espejo retrovisor interior es una pantalla que recoge las imágenes trasmitidas desde una cámara trasera. La sensación es que todo lo que está detrás del coche está muy cerca, pero tiene una excelente visibilidad. Se puede cancelar y se queda como un espejo convencional. 

Las pequeñas levas tras el volante permiten seleccionar la mayor o menor recuperación de energía, la de la izquierda la aumenta y la derecha la baja. Puede ser útil en pendientes para incrementar la recuperación de energía, al mismo tiempo que actúa como freno. En algunas partes del recorrido que realicé conseguí recuperar hasta 10 km de autonomía. La recuperación es sustancialmente mayor en frenadas que cuando retienes el coche al levantar el pie del acelerador.

La respuesta del motor es rápida y eficaz, como se espera de un modelo eléctrico. En la parte inferior central del volante hay un botón grande que al pulsarlo modifica los modos de conducción entre Sport, Eco y Confort. Se indica en la pantalla y modifica también el color del cuadro de instrumentos frente al conductor. Existe también la posibilidad de crear un modo propio del conductor.

El aislamiento acústico del habitáculo es bueno para proteger a los ocupantes de los ruidos exteriores, por ejemplo, del tráfico de la ciudad, pero se nota bastante la rumorosidad aerodinámica. En los, alrededor de 200 km, en los que probamos el coche por los montes de Málaga, y en autovía, se percibe bastante y resulta chocante en un coche eléctrico que no hace ruido.

Renault ha optado en este modelo por incorporar los sistemas de navegación y servicios de Google, lo que es un acierto porque puedes utilizarlo sin tener que pasar por un aprendizaje previo. Además de ser eficaz y fiable se puede actualizar y ayuda a planificar rutas con los puntos de recarga y a preparar la batería, calentándola unos minutos antes para hacer más rápida la carga.

Ayudas a la conducción

En total el nuevo Megane 100% eléctrico lleva 26 ayudas a la conducción, entre las que destacan por su novedad en la marca el regulador de velocidad adaptativo y contextual que con la ayuda del navegador prevé la llegada a una rotonda y reduce la velocidad, el ABS trasero para frenadas de emergencia marcha atrás o el centrado de carril incluso si falta una de las marcas laterales por ejemplo en una carretera secundaria.

La dirección se ha desarrollado para que tenga muy poca multiplicación esto significa que con girar muy poco el volante la respuesta de las ruedas es mayor. Me resultó muy cómodo y e rápida adaptación. Incluso en carreteras con curvas enlazadas, en eso caso era bastante agradable.

Mientras el Megane con propulsiones térmicas e hibridas se produce en las plantas españolas, el nuevo Megane E-TECH 100% eléctrico se fabrica en Douai (Francia), en el que está considerado el nuevo polo industrial eléctrico en Europa ya que está cerca de los principales mercados. El objetivo es producir 400.000 vehículos al año con esta tecnología a la que la planta de Renault en Sevilla suministra la reductora.