El mercado de automoción en España sigue en la senda de la recuperación tras el duro golpe que supuso la pandemia del COVID-19, pero su retorno a los niveles previos a la crisis se demora todavía más. Según las previsiones de la Asociación Nacional de Vendedores y Reparadores de Vehículos (Ganvam), la recuperación será gradual y sostenida, con incrementos moderados hasta 2030. Según sus estimaciones, el sector no alcanzará su plena normalización hasta una década después del impacto de 2020.
Crecimiento estable, pero sin grandes saltos
Las matriculaciones de turismos en España aumentarán un 2,5% en 2025, superando la barrera de 1,04 millones de unidades. Este crecimiento seguirá siendo sostenido en los próximos años: un 4% en 2026, un 3,1% en 2027 y alrededor del 3,2% anual hasta alcanzar en 2030 los 1,2 millones de unidades matriculadas, cifra similar a la de 2019.
Los diferentes canales de venta también reflejarán este crecimiento desigual. Mientras el canal particular crecerá un 3,8% en 2025, hasta las 474.218 unidades, el de empresa lo hará en un 2,9%. Por otro lado, el canal de alquiladores caerá un 1,3% tras un 2024 excepcional por la recuperación del turismo.
Gerardo Cabañas, presidente interino de Ganvam / A.M.
La electrificación avanza, pero sigue siendo insuficiente
La transición hacia la movilidad sostenible sigue siendo una prioridad, aunque los objetivos de descarbonización marcados por la Unión Europea podrían estar en peligro debido a la lenta adopción de vehículos electrificados.
Para 2025, los turismos electrificados (eléctricos puros e híbridos enchufables) representarán el 17% de las matriculaciones, con una progresión al alza en los años siguientes hasta alcanzar el 33,6% en 2030. No obstante, esta evolución sigue estando por debajo del 20% deseado por el sector para 2026.
Por su parte, los modelos híbridos no enchufables se consolidarán como la principal opción en 2025, alcanzando el 40% del mercado. Este tipo de tecnología superará por segundo año consecutivo a los modelos de gasolina, cuya cuota caerá al 32%, perdiendo más de cinco puntos en comparación con 2024. El diésel, en cambio, seguirá en franco retroceso, con apenas un 7% de las matriculaciones, cuando hace una década superaba el 60%.
Factores de incertidumbre y retos pendientes
Ganvam advierte que, si bien el crecimiento está garantizado, existen factores que podrían alterar la evolución prevista. Entre ellos, destacan la inestabilidad geopolítica, la ralentización del crecimiento económico en la zona euro y la falta de confianza del consumidor, que sigue sin alcanzar los niveles previos a la pandemia.
El presidente de Ganvam, Gerardo Cabañas, ha subrayado la importancia de revisar las estrategias actuales de incentivación para la compra de vehículos eléctricos. "Es necesario un plan de incentivos más eficaz y de aplicación directa, que garantice una movilidad eficiente para todos y no excluya a grandes capas de la población por motivos económicos", afirmó.
El sector del transporte también se transforma
El crecimiento de las matriculaciones no se limita a los turismos. Los vehículos comerciales ligeros mantendrán un crecimiento anual del 2% hasta 2030, impulsado por la renovación de flotas y la normativa de emisiones. En cuanto a los vehículos industriales, tras cerrar 2024 con un crecimiento del 30% respecto a los niveles prepandemia, se estabilizarán en torno a las 30.000 unidades anuales.
Las motocicletas y ciclomotores también mantendrán una tendencia positiva, consolidándose como una opción clave en la movilidad urbana. Se prevé que en 2025 se matriculen cerca de 240.000 unidades, un 1,7% más que el año anterior.