La huelga convocada por CGT y que ha paralizado la actividad en Seat ha sentado muy mal al presidente de la compañía, Wayne Griffiths. La primera huelga que ha tenido que vivir desde que fue nombrado presidente de Seat y Cupra ha llegado en mal momento por las dificultades para encontrar algunos componentes, por lo que Griffiths ha calificado la protesta de "innecesaria".
"Ayer en Martorell se paró la fábrica por una huelga innecesaria. Estamos en una crisis de los microchips y está la guerra en Ucrania; así que no entiendo que se haga una huelga ahora", ha lamentado el presidente de Seat al referirse, en el foro Wake Up Spain de El Español, a la convocatoria de CGT, el tercer sindicato en la compañía. Pese a contar con el rechazo de UGT y CCOO, que tienen una amplia mayoría, la huelga ha paralizado la producción en las tres líneas de montaje el martes 5 de abril en tres paros parciales de unas dos horas por cada turno, según confirmó un portavoz de la empresa. El paro ha coincidido, además, con un día de poca afectación del ERTE al disponer de microchips y otras piezas suficientes para trabajar en todas las líneas a uno, dos o tres turnos.
Aumento salarial tras la huelga
Wayne Griffiths ha dicho que "entiende" las reivindicaciones de los trabajadores, aunque ha advertido de que "no es el momento" de parar, sino de "asumir la decisión de unidad y ser más responsables, porque estamos en una situación muy delicada de la economía, y hay que arrancar, no parar". Ha recordado que es "difícil seguir fabricando" con problemas como la "falta de semiconductores y falta de piezas", y ha incidido en que, en general, observa en España "muchos conflictos que no son necesarios y no ayudan en este momento".
En las imágenes de la huelga difundidas por CGT se puede ver una marcha de trabajadores que abandonan sus puestos de trabajo al grito de "miseria, no, convenio, sí". Los paros parciales se repetirán el próximo martes 12 de abril para protestar por los recortes laborales que pretende aplicar Seat en el nuevo convenio colectivo que se está negociando.
La valoración de Griffiths de que la huelga era "inncesaria" ha tenido lugar poco después de que la dirección de recursos humanos de Seat haya modificado su posición en la mesa de negociación. En el mismo día de la huelga, Seat se comprometió a pagar los atrasos por una subida salarial del 6,5% en 2021, uno de los puntos que reclaman todos los sindicatos.
Nuevos empleos del coche eléctrico
Griffiths ha segurado en el mismo foro que "hay que ponerse objetivos concretos para este año y el que viene, no para 2030" y que España "no puede seguir viviendo del turismo", porque "no es sostenible". A su juicio, la industria de la automoción, con los futuros coches sostenibles y eléctricos, "puede ser parte de la solución" en un país con un "potencial enorme en energías renovables", necesarias para recargar los coches eléctricos, y un 30 % de paro juvenil, según ha recordado.
El directivo ha recordado que el consorcio alemán instalará su planta de baterías en Sagunto (Valencia), con una capacidad máxima de 40 gigavatios-hora (GWh) y una plantilla de más de 3.000 personas, y movilizará una inversión, junto con las empresas aliadas en la candidatura que opta a la adjudicación del PERTE, de 7.000 millones de euros en su plan de electrificación.
Wayne Griffiths ha resaltado la importancia del talento y de los nuevos perfiles laborales que vienen de la mano de la electrificación y la digitalización. "Hay que buscar a gente que sepa de baterías o de litio. Hay futuro en España, pero este tipo de perfiles se va fuera y hay que conseguir que se queden", ha criticado.