El grupo Volkswagen esperaba que la convocatoria del proyecto estratégico de recuperación económica con fondos europeos (PERTE) del coche eléctrico estuviera en marcha con más celeridad, pero ha topado con la burocracia administrativa. Volkswagen acepta a regañadientes el calendario previsto por el Gobierno español, que prevé adjudicar los 3.000 millones a los que opta el proyecto de Seat y Volkswagen en el próximo verano.
La directora general de Volkswagen España, Laura Ros, ha asegurado que "cuanto más se agilice el PERTE mejor", pero ha precisado que la marca se adaptará al calendario que fije el Gobierno. Laura Ros ha explicado que es un tema de calendario, ya que cuando se presente la convocatoria (a finales de año se publicaron las bases del PERTE) habrá tres meses para presentar propuestas y luego el Gobierno necesitará tres meses para estudiarlas. "Nos adaptaremos a los tiempos, pero cuanto más se pueda agilizar mejor", ha considerado Ros.
Ros respondía así a las previsiones manifestadas por el Ejecutivo, que estima adjudicar el PERTE "probablemente" en el tercer trimestre. La directiva hizo estas declaraciones en la planta de Pamplona, que aspira a producir coches eléctricos de varias marcas del grupo junto a la de Seat de Martorell a partir de 2025 con la ayuda de los fondos europeos Next Generation EU.
Efectos de los retrasos
Unas semanas antes, el presidente de Seat, Wayne Griffiths, advirtió del riesgo que tiene para el proyecto seguir acumulando retrasos. De hecho, el Grupo Volkswagen hizo en diciembre una aprobación de los planes del coche eléctrico en España condicionada a la adjudicación del PERTE. Seat y Volkswagen optan a las ayudas con una alianza de una treintena de empresas para cubrir todo el ecosistema del vehículo eléctrico, desde la extracción de litio, la producción y empaquetado de baterías, el ensamblaje de turismos y su reciclaje.
Sobre las matriculaciones este año del mercado español -Volkswagen España no facilita previsiones de ventas- Ros ha indicado que, en línea con las estimaciones de la patronal de fabricantes Anfac, se venderán un millón de coches y todoterrenos. No obstante, ha advertido de que los niveles de prepandemia no se recuperarán hasta 2023. En este escenario el objetivo de Volkswagen España es generar volumen e incrementar cuota de mercado y "muy apalancados" en el liderazgo de SUV urbano que han logrado en 2021.
Sobre la falta de semiconductores y hasta cuándo seguirá su impacto en la producción, el director de producción de Volkswagen Navarra, Miguel Ángel Grijalba, ha asegurado que no lo tiene claro, porque es algo que afecta a nivel mundial a todas las marcas. "Lo que hacemos es flexibilizarnos y estar preparados para lo que venga y de la mejor manera posible. De esa forma somos capaces, ante imprevistos, de trabajar. La semana pasada fueron dos días y esta semana van a ser cinco con los mismos criterios de productividad y calidad".