Aparentemente, nada ha cambiado en Seat en relación con el conflicto independentista que vive Cataluña. El presidente de Seat, Luca de Meo, insistió el martes en una conferencia en Madrid que todo seguirá igual mientras haya seguridad jurídica para la compañía, aunque por primera vez reconoció que los disturbios perjudican la imagen de Cataluña para posibles inversiones empresariales. En las últimas semanas, la preocupación ha aumentado también en la mayoría del comité de empresa de Seat, que ha pedido al vicepresidente de la Generalitat, Pere Aragonès, una misión diplomática.
El vicepresidente prepara, junto al 'conseller' de Treball y también miembro de ERC, Chakir el Homrani, una visita al cuartel general de Volkswagen a petición del comité de empresa. "Hay preocupación por la deriva que están cogiendo los acontecimientos. Si no hay riesgo político, no pasa nada, pero en Alemania se empiezan a fijar en la situacion", ha admitido el presidente del comité de empresa y dirigente de UGT, Matías Carnero, en declaraciones de la web Coche Global.
Tras los pasos de Jordi Pujol
La imagen de los disturbios violentos, los cortes de carreteras y el parón que sufrieron las plantas de Martorell, de la Zona Franca de Barcelona y de El Prat, con 3.500 coches que se dejaron de producir, pueden ser contraproducentes en la percepción que tienen los directivos del grupo Volkswagen. "De momento no tiene que ser motivo para asignar o no asignar producción porque tenemos un nivel muy alto en calidad y en la producción, pero hay que solventar la situación, especialmente por los efectos que puede tener en los proveedores", ha explicado Carnero.
En Seat preocupan más los cortes de las carreteras más cercanas a Martorell que el bloqueo de la AP-7 en La Jonquera ya que las piezas de los proveedores más próximos tienen que llegar en un tiempo máximo de unas horas. En cambio, las que provienen de fabricantes más lejanos tienen un margen de varios días antes de que se tenga que parar la línea de montaje por falta de componentes.
En una visita que llevaron a cabo a Martorell el vicepresidente y el consejero, el presidente del comité les pidió que emularan a Jordi Pujol, que visitó en varias ocasiones la sede central de Volkswagen para entrevistarse con el presidente del grupo con el fin de ofrecer la colaboración de la autonomía en nuevas inversiones de la multinacional.
Apoyo a inversiones en Martorell
Las gestiones para la entrevista están muy avanzadas y se baraja como posibles fechas del encuentro los días 25 y 26 de noviembre, aunque la confirmación depende de eventos de última hora en la agenda.
En octubre de 2017, después del referéndum y la declaración uniletaral de independencia, Seat mantuvo su sede social en Martorell y evitó su traslado fuera de Cataluña siguiendo los pasos de miles de compañías.
Como telón de fondo, la misión diplomática encomendada a Aragonès incluye también apoyar las opciones de la planta de Martorell para acoger inversiones a largo plazo. Este ejercicio acabará como el tercer mejor año en producción de Martorell y se prevé que la factoría se mantenga cerca del 100% de utilización durante dos o tres años.