Tesla está en apuros. Así lo confiesa Elon Musk, el emprendedor surafricano que se hizo con el control de la compañía al comprarla a sus fundadores. Tesla solo tiene liquidez para 10 meses, por lo que ha anunciado que morará con lupa todos sus gastos. La sinceridad le ha costado a Tesla un desplome en bolsa que ha situado el valor de las acciones en el nivel más bajo desde enero de 2017.
Elon Musk ha vuelto a recurrir a una comunicación enviada a los trabajadores de Tesla para explicar los problemas financieros de la marca. Ha pedido nuevos sacrificios a sus empleados, a los que advierte de que los 2.200 millones de dólares de liquidez con los que la compañía cerró el primer trimestre "es mucho dinero pero, de hecho, al ritmo de gastos del primer trimestre", la empresa solo cuenta con "diez meses para alcanzar el punto de equilibrio".
Los 2.200 millones de dólares de liquidez son un 18 % menos que un año antes y un 40 % por debajo de lo que tenía al final del cuarto trimestre de 2018. El mensaje, cuya existencia no ha sido confirmada por Tesla, indica que la falta de liquidez obliga al fabricante de automóviles eléctricos de lujo a emprender una nueva fase de recortes de gastos "de cualquier clase donde sea en el mundo".
Revisión de gastos y salarios
Según el texto, Musk pidió revisar los costes de "componentes, salarios, gastos de viaje, alquileres" y "literalmente cada pago" que sale de sus cuentas bancarias. Los gastos de la compañía serán personalmente revisados por el nuevo director financiero, Zach Kirkhorn, y por el propio Musk, añadió la web Electrek. "Esto es duro pero es la única forma para que Tesla sea sostenible financieramente y tenga éxito en nuestro objetivo de ayudar a hacer el mundo sostenible medioambientalmente", añadió Musk.
Este memorándum de Musk a sus empleados sale a la luz pocos días después de que Tesla consiguiera 2.700 millones de dólares a través de una oferta de acciones y emisión de bonos de deuda. Tesla perdió 702 millones de dólares en el primer trimestre del año.
Caída en bolsa del 7,58%
Las pérdidas fueron superiores a lo esperado por los analistas y se produjeron tras una caída de las entregas de los vehículos de la compañía. Tesla sólo entregó 63.000 vehículos en el primer trimestre del año, en vez de los 76.000 previstos, algo que Musk achacó a la menor demanda en el primer trimestre a que "a la gente no le gusta comprar vehículos en el invierno".
Tras la filtración del memorándum de Musk, las acciones de Tesla cayeron un 7,58% y sesituaron en el nivel más bajo en dos años y medio después de sufrir fuertes descensos en otras jornadas.