Stellantis y la multinacional china CATL han anunciado oficialmente la construcción de una gigafactoría de baterías de litio ferro fosfato (LFP) en Zaragoza, más asequibles. La inversión conjunta, para la que ha sido necesario despejar varios obstáculos en el camino, alcanzará los 4.100 millones de euros al final del proyecto. La planta de baterías se situará junto a las instalaciones de Stellantis en Figueruelas y contempla una capacidad de producción de baterías que llegará hasta 50 GWh en varias fases, dependiendo de la evolución de la demanda de vehículos eléctricos.

El anuncio pone fin a semanas de incertidumbre tras la dimisión de Carlos Tavares como CEO de Stellantis y las tensiones generadas por la decisión del Gobierno chino de congelar inversiones en Europa en respuesta a los aranceles impuestos por la Unión Europea a los vehículos eléctricos chinos.

Según fuentes cercanas a la negociación, las gestiones diplomáticas encabezadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, han sido clave para desbloquear este ambicioso proyecto. Sánchez se reunió en los últimos días con Carlos Tavares, poco antes de su dimisión, y con el CEO de CATL. Previamente, Stellantis logró su exigencia de recibir 300 millones en ayudas públicas mediante el PERTE. 

Rúbrica del acuerdo Stellantis CATL en la planta de Zaragoza

Las administraciones celebran la inversión

El presidente del Gobierno se ha mostrado muy satisfecho con el anuncio de la inversión, que muestra los frutos de la colaboración público-privada, y ha agradecido a los presidentes de Stellantis y CATL, John Elkann y Robin Zang, su "compromiso" con España y su "apuesta decidida" por el país para dar impulso a un futuro descarbonizado. El ministro de Industria, Jordi Hereu, también ha celebrado la "fabulosa" confirmación del acuerdo entre Stellantis y CATL: "El proyecto de coches eléctricos y baterías para Zaragoza con una inversión de más de 4.000 millones de euros es ya una realidad".

El presidente aragonés, Jorge Azcón, ha celebrado la confirmación de la gigafactoría, que ha calificado como un "anuncio histórico" y la "mejor noticia para la automoción aragonesa". Con esta inversión, Aragón se quita la espina clavada con la pérdida de la gigafactoría del grupo Volkswagen, que finalmente ganó Sagunto (Valencia).

Pedro Sánchez con Robin Zeng, presidente y CEO de CATL / MONCLOA

Un paso hacia la descarbonización

Diseñada para ser totalmente neutra en carbono, la planta de Zaragoza fabricará baterías asequibles y duraderas destinadas principalmente a turismos y SUV eléctricos en los segmentos B y C, reforzando la estrategia de electrificación de Stellantis. La tecnología de LFP, más económica y eficiente que la de litio convencional, permitirá ofrecer vehículos eléctricos competitivos y accesibles, alineándose con los objetivos de descarbonización de la compañía, que aspira a ser carbono neutral para 2038.

John Elkann, presidente de Stellantis, celebró el acuerdo, en el que ha tenido un papel decisivo tras el cese de Tavares: “Esta joint venture llevará la producción de baterías a un centro de energía limpia líder en Europa. Agradecemos a las autoridades españolas su apoyo continuo para hacer posible este anuncio.”

Robin Zeng, CEO de CATL, destacó la relevancia tecnológica del proyecto: “Con nuestra experiencia en baterías y el conocimiento local de Stellantis, esta gigafactoría será un ejemplo de innovación y sostenibilidad.”

Un impulso clave para Figueruelas y Aragón

El proyecto refuerza el papel de la planta de Stellantis en Figueruelas como pilar de la industria automovilística española y europea. Con un enfoque en la producción de baterías asequibles, Zaragoza se posicionará como un eje estratégico para la transición energética y la movilidad eléctrica en Europa.

Además, la joint venture refleja la creciente colaboración entre empresas europeas y chinas en un contexto de transición verde global. CATL, que ya cuenta con plantas en Alemania y Hungría, aportará a Zaragoza tecnología de vanguardia en la fabricación de baterías, consolidando a España como líder en movilidad eléctrica.

Inicio de producción

Está previsto que las operaciones comiencen a finales de 2026, con el cierre de la joint venture programado para 2025, sujeto a las habituales condiciones reglamentarias. Este anuncio, que se enmarca en el plan estratégico de Stellantis y CATL para liderar la electrificación en Europa, subraya la importancia de seguir avanzando en alianzas público-privadas para consolidar la competitividad de la industria europea frente a los desafíos globales.