Un pedido adicional de 6.000 unidades del model Seat León ha llevado a la dirección de la compañía y al comité de empresa a renegociar el calendario de trabajo con nuevos turnos de fin de semana y a prever la contratación de más personal mediante empresas de trabajo temporal (ETT).
Hasta enero, Seat había planificado una producción global en 2020 de 504.472 vehículos en Martorell, una cifra muy similar a la registrada al cierre de 2019. Pero en los últimos días, los concesionarios de Seat han contabilizado pedidos adicionales de la generación actual del Seat León que suman unas 6.000 unidades, que se añaden a las 177.016 unidades que se habían planificado. La marca ha lanzado una oferta especial, a partir de 23.240 euros o 250 euros mensuales, para los últimos meses de vida del modelo antes de que llegue al mercado la nueva generación del León
Aumento de la flexibilidad
La dirección de Seat planteó al comité la necesidad de ir más allá de los mecanismos de flexibilidad al tener que reabrir el calendario de trabajo de marzo, que ya se había cerrado unos días antes. La compañía planteó varias fórmulas para afrontar las nuevas necesidades como alargar una hora el turno de tarde de lunes a viernes o en turnos adicionales de maña y tarde durante varios sábados hasta junio.
Finalmente, el comité manifestó su rechazo al trabajo adicional mediante la prolongación de la jornada diaria alegando el desgaste que supondría para la plantilla y aceptó programar turnos extraordinarios pero solo durante sábados por la mañana, según consta en el acuerdo alcanzado entre la empresa y los sindicatos UGT y CCOO. En marzo, la línea de montaje número dos, en la que se ensambla el León, trabajará en turno de mañana los sábados 7, 14, 21 y 28.
Lanzamiento del nuevo León
En los meses de abril y mayo, se planificarán más turnos adicionales hasta llegar a un total de 10 para producir los 6.000 coches adicionales. Además, el acuerdo prevé otra medida para incrementar la producción diaria mediante el desplazamiento de las pausas de los operarios, lo que conllevará la necesidad de incorporar a un centenar de empleados como refuerzo mediante ETT.
"Cualquier aumento de producción, con la actual incertidumbre del sector de la automoción, es una buena noticia, teniendo en cuenta que va a desaparecer un modelo y que siempre hay una regresión ante la llegada de un vehículo nuevo", ha explicado Carnero. La producción del nuevo León ha empezado ya con algunas unidades diarias en fase de prueba que se irán aumentando hasta el lanzamiento del modelo al inicio del verano.