La planta de Renault de Valladolid aumentará la plantilla en los próximos meses al substituir la producción del cuadriciclo eléctrico Twizy, que se traslada a Corea del Sur, por baterías para las nuevas versiones híbridas. El cambio fue anunciado por al dirección de Renault España a los sindicatos en una reunión para informar de las primeras consecuencias de la asignación a Valladolid y Palencia de la producción de las versiones híbridas enchufables del Captur y del Mégane. Cuando se estabilice la producción de baterías para esos nuevos modelos, habrá unos 70 empleados destinados a esa tarea en lugar de los 30 que hay ahora para ensamblar el Twizy.
Las baterías serán para las versiones híbridas
Hace una semana, el vicepresidente mundial de producción de la alianza Renault Nissan Mitsubishi, José Vicente de los Mozos, aseguró a la web Coche Global que estaban estudiando las repercusiones industriales y productivas que tendría la asignación de los dos modelos híbridos a Valladolid y Palencia. La primera consecuencia será el traslado de la producción del Twizy y el inicio del ensamblaje de las baterías, aunque puede haber más ya que la marca tiene unas expectativas de ventas elevadas del Captur y Mégane híbridos.
Los sindicatos UGT, CCOO y SPC han pedido a Renault que tenga en cuenta los 30 empleados temporales que trabajan actualmente en el ensamblaje del Twizy para la nueva actividad de producción de baterías. El Renault Twizy ha quedado relegado a un coche de flotas. En el primer semestre de 2018, Renault fabricó 2.162 unidades del cuadriciclo, lo que supuso un aumento del 74% en relación con las mismas fechas de 2017. La producción del Twizy formó parte de un plan industrial aprobado en 2009 en un momento muy complicado de la factoría de Valladolid.