La fábrica de Ford de Almussafes se convertirá la semana próxima en una excepción en la industria de automoción española con la puesta en marcha de un expediente de regulación temporal de empleo (ERTE). La plantilla volverá así a la situación que había tenido hasta junio de 2023, aunque en esta ocasión el motivo no es la falta de suministro de microchips sino la baja producción de la planta.
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El nuevo ERTE afectaría a un máximo de 750 empleados cada día de forma rotatoria y podría incluir también días de parada total de la actividad que englobarán a todos los trabajadores. La dirección de Ford ha anunciado al comité el inicio del periodo formal de negociación exprés con la intención de que el ERTE se comience a aplicar a partir del lunes 12 de febrero y con una duración prevista hasta el 30 de abril.
Hasta 15 días de parón
La compañía ha justificado el nuevo ERTE por la "bajada de producción" en las plantas de fabricación de vehículos y la "falta de capacidad de ciertos proveedores" en la actividad de ensamblaje de motores. El ERTE prevé una afectación máxima de 15 días de paralización de la actividad en la planta de montaje de vehículos y de cuatro días en la de motores.
La fecha de final de abril para la finalización del ERTE no significa que desaparezcan los problemas a partir de mayo, sino que tiene relación con la alterantiva que se prevé que plantee la dirección mundial de Ford para la factoría de Valencia debido a la previsión de un horizonte con baja producción al dejar de ensamblar la furgoneta Transit durante este año y quedarse colo con el SUV Kuga.
El sindicato UGT, mayoritario en el comité de empresa, ha aceptado "abrir una ventana de negociación de manera parcial y acotada en el tiempo", aunque con un mes menos de duración, hasta final de marzo. La central sindical ha recordado que la plantilla espera "noticias sobre inversiones y carga de trabajo".
Pérdidas de Ford con los eléctricos
UGT ha instado a la dirección de Ford a "ajustar bien las cifras" de afectados del ERTE y ha puesto algunas líneas rojas: según UGT. el excedente originado en la planta de motores por la desaparición del turno de noche y en las de vehículos tras la marcha de la furgoneta destinada al mercado americano "no podrá engrosar las listas diarias de afectados". Además sostiene que en los días de producción en los dos turnos de vehículos (950 coches) y en motores (1.700 unidades) "no podrá haber nadie en regulación de empleo".
El ERTE llega en un momento de máxima incertidumbre entre los trabajadores ante la decisión de Ford de dejar en suspenso las inversiones para los nuevos modelos eléctricos que tenía que asignar a Valencia. La multinacional anunció unas pérdidas de 4.700 millones de dólares con los coches eléctricos en 2023, lo que ha llevado a Ford a retrasar inversiones hasta que haya demanda suficiente en el mercado.