La transición de la industria de automoción española hacia una movilidad sin emisiones va dando pequeños pero importantes pasos hacia adelante. Por primera vez, una fábrica ubicada en España producirá más unidades eléctricas que con motor diésel y de gasolina de un mismo modelo. Se trata de la planta de Nissan de Barcelona, que a partir de enero cambiará la proporción entre la versión eléctrica y la diésel de la furgoneta compacta NV200, según los planes a los que ha tenido acceso la web Coche Global.
Hasta ahora, el volumen de producción de la versión diésel del vehículo superaba por muy poco al que alcanzaba el modelo eléctrico e-NV200 pero la situación cambiará a partir de enero con las últimas previsiones comunicadas por la dirección de Nissan Motor Ibérica a los sindicatos. La producción diaria de las dos versiones de la furgoneta aumentará de 82 a 88, de las que 60 unidades corresponderán a la e-NV200 en lugar de las 40 que se ensamblan hasta diciembre.
Diferencia de precio
Este aumento de la producción hasta representar un 68% del volumen total del modelo se debe a un incremento de las ventas del vehículo eléctrico, que se fabrica en exclusiva mundial en la factoría de Nissan de Barcelona. La subida de la demanda de la versión eléctrica se produce a pesar de la importante diferencia de precio con la furgoneta diésel. La versión de gasóleo se vende a partir de 11.700 euros frente a los 27.800 euros de la eléctrica.
La dirección de Nissan destaca el valor de la mejora de la perspectivas del modelo eléctrico mientras busca una solución para la planta de la Zona Franca de Barcelona, que se encuentra en un nivel de actividad bajo mínimos. El incremento de producción del modelo e-NV200 no es suficiente para compensar el descenso de la versión diésel de la furgoneta así como de las versiones de la 'pick up' para Nissan, Mercedes y Renault con las marcas Navara, Clase X y Alaskan, respectivamente.
De hecho, los sindicatos temen que la multinacional decida en los próximos meses dejar de producir la versión diésel de la furgoneta NV200 ante el descenso sufrido y las malas perspectivas comerciales de gasóleo.
Las previsiones de producción de Nissan en Barcelona han caído hasta unas 78.000 unidades, lo que equivale al 38% de la capacidad máxima de la fábrica. A ese descenso ha contribuido el final de la producción del modelo Pulsar y la versión diésel de Evalia, la furgoneta NV200 configurada para transporte de pasajeros.