El despido fulminante de tres trabajadores de la planta de Mercedes de Vitoria ha prendido la mecha de la conflictividad laboral. El comité de empresa ha respondido a los despidos, que afectan a militantes de UGT, con la convocatoria de movilizaciones que irán subiendo de intensidad hasta llegar a paros y huelgas, según advierten los sindicatos.
Las movilizaciones han comenzado con una concentración ante la delegación de Trabajo en la que tuvo lugar la conciliación por los despidos a la que no acudió la empresa. El jueves y el viernes habrá nuevas convocatorias de protesta en las entradas a la fábrica de Mercedes de Vitoria como parte de una escalada de movilizaciones "antes de llegar a convocar paros o huelgas", según explica el comité de empresa en un comunicado.
Inusual unidad en el comité
Los despidos han provocado una inusual unidad en el seno del comité de empresa con la firma de un acuerdo por parte de más del 90% de la representación. El pacto suscrito por UGT, CCOO, ELA, LAB y ESK prevé un protocolo de actuación conjunto para estos tres despidos y para situaciones similares que se puedan producir en el futuro.
Los sindicatos también han pedido a la plantilla que se acojan a la campaña con el lema 'No Colaboro', por la que piden a los empleados que se limiten a cumplir con sus obligaciones laborales estrictas y que no lleven a cabo horas extras, cursos fuera de horario y otras medidas voluntarias.