"Nos gustaría pensar, por lo menos, que estamos haciendo todo lo posible, que nadie pueda decir que no estamos haciendo todo lo que está en nuestra mano para que Nissan continúe por muchos años en Cataluña". La frase es de Matilde Villaroya, la directora general de Industria de la Generalitat de Cataluña. Según Villaroya, el Govern y el Ministerio de Industria tienen muy avanzado el plan de ayudas que propondrán a la multinacional con la esperanza de que la planta de Nissan de Barcelona siga operativa.
En una entrevista de Europa Press, Matilde Villarroya explica que las conversaciones con el Ministerio de Industria y la dirección de la compañía en España "están muy avanzadas" y que el plan está prácticamente cerrado.
La dirección general de Industria de la Generalitat forma parte de la mesa de trabajo en la que están trabajando con el Gobierno y Nissan para hacer una propuesta que pueda convencer a la compañía, y que gestionan con contacto directo la ministra de Industria, Reyes Maroto, y la consejera de Empresa, Àngels Chacón. Villarroya prevé que el plan, algo así como una candidatura o plan de negocio, se presente este mes de febrero o marzo y ha defendido que han hecho todo lo que se podía para retener a la multinacional japonesa en Barcelona.
Recortes más duros en Nissan
Sin embargo, la propuesta de ayudas para sostener la factoría de Nissan de la Zona Franca de Barcelona tendrá numerosos obstáculos. En primer lugar, la falta de productos para la planta en el horizonte agravada por la pérdida del modelo Mercedes Clase X, lo que los sindicatos consideran como una "muerte lenta". En segundo lugar, la candidatura para seguir invirtiendo en Barcelona llega cuando Nissan acaba de anunciar que endurecerá la reestructuración que prevé presentar en mayo después de entrar en pérdidas en el último trimestre de 2019. En sus planes se incluye el cierre de fábricas y el repliegue industrial en las regiones donde la marca ha sufrido las peores caídas de ventas, como en Europa.
Los sindicatos han convocado una manifestación la semana que viene ante la Delegación del Gobierno en Barcelona para protestar por la situación de la planta porque, alertan, tendrá un excedente de plantilla debido a la pérdida de la 'pick-up' de Mercedes-Benz.