Volkswagen ha emitido este martes un inquietante comunicado. Encabezado con el nuevo logo con el que quiere mirar hacia el futuro de la movilidad eléctrica, la multinacional alemana ha confirmado su peor pesadilla: la larga sombra del 'dieselgate' ha vuelto a reaparecer y ha salpicado a los máximos directivos actuales, a los que creía a salvo del escándalo de manipulación de motores diésel. La Fiscalía de Braunschweig ha anunciado que ha presentado cargos contra el presidente del grupo, Herbert Diess, contra el presidente del consejo de administración, Hans Dieter Poetsch, y contra el expresidente Martin Winterkorn.
El fiscal acusa a Diess, Poetsch y Winterkorn de "manipulación del mercado de valores" por no haber informado "intencionadamente" a los inversores sobre el impacto financiero del 'dieselgate'. La imputación formal de la cúpula actual y la anterior del grupo Volkswagen se produce después de que el fiscal interrogara durante varias horas a Herbert Diess hace unas semanas, según explica la prensa alemana.
Diess. la esperanza
Diess era la última esperanza de los accionstas de Volkswagen para ahuyentar las consecuencias de un escándalo que ha costado a la compañía más de 29.000 millones en compensaciones y sanciones, especialmente en Estados Unidos. En septiembre de 2015, cuando la agencia de medio ambiente de Estados Unidos destapó el fraude de los motores para camuflar unas emisiones por encima de lo permitido, Diess llevaba tres meses en la dirección del grupo y como presidente de la marca Volkswagen.
Diess accedió al cargo de presidente del grupo Volkswagen en sustitución de Matthias Müller, anterior presidente de Porsche que fue ascendido de urgencia para relevar al cesado Martin Winterkorn. El nombramiento de Diess se interpretó en el sector como un gesto del grupo para intentar hacer borrón y cuenta nueva con el dieselgate.
Sin embargo, la acusación de la fiscalía ha dado al traste con esos planes. Los abogados de Diess aseguran en un comunicado que el directivo no podía prever la consecuencias del caso sobre el mercado y que, por tanto, no pudo informar de la situación. Además, afirman que continuará desempeñando "sin obstáculos" su papel de consejero delegado del grupo automovilístico. "Continuará defendiéndose con todos los medios legales", subrayan.
Caída en la bolsa
Las acciones de Volkswagen sufrieron un súbito desplome justo en el momento en el que se difundió la noticia de la imputación de la cúpula, aunque en las horas posteriores se ha suavizado el descenso hasta cerrar con un -2,16%.
Según el juez del tribunal regional de Braunschweig Christian Jaede, Winterkon conocía el fraude dos meses antes de que saliera a la luz, por lo que se le acusa de abuso de confianza. Jaede también afirma que Winterkorn estuvo presente en una reunión de la alta dirección de la compañía para estudiar cómo tratar con los reguladores de Estados Unidos, que amenazaban con prohibir la marca Volkswagen por niveles excesivos de la contaminación. Los demandantes defienden que, a partir de ese momento, Winterkorn era consciente del fraude.