La industria de automoción sigue notando los efectos del enfriamiento de la economía y de la transición ecológica. Las fábricas de vehículos y de componentes se mantienen como el primer sector en número de afectados por expedientes de regulación de empleo (ERE), con 26.430 trabajadores incluidos en estas medida de ajuste de las plantillas de enero a noviembre de 2019.
La cifra de 26.430 empleados acumulada en los 11 primeros meses del año pasado suponen un incremento del 3,6% en relación con los 25.504 que había hasta octubre y se quedan muy cerca de los 27.730 afectados registrados en todo el año 2018 a la espera de los datos de diciembre pasado.
El epígrafe de fabricación de vehículos de motor se mantiene como la primera actividad en número de trabajadores afectados por los ERE, que sumaron un total de 77.359 empleados en el conjunto de sectores, un 23,5% más. De los 26.430 afectados del sector del automóvil, la gran mayoría (25.437) fueron por expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE), lo que supone que pasan a ser considerados como desempleados durante los días comunicados por las compañías como necesarios para ajustar su producción a sus ventas.
Más despidos
En toda la economía española, los afectados por ERTE alcanzaron 47.571 personas. Además, hubo 27.525 empleados que perdieron su trabajo mediante despidos colectivos, un 52% más. En la industria de automoción hubo 981 despedidos por los ERE de extinción de contratos.
En los últimos meses, grandes fábricas han puesto en marcha ERTE, entre las que se incluyen las de Iveco y Ford. Además, algunas fábricas han anunciado planes para cerrar o vender factorías, como en el caso de la planta de Continental de Rubí.
Las grandes fábricas de vehículos de España cerraron 2019 con un leve aumento de la producción del 0,1% gracias a la buena evolución de los últimos meses, especialmente diciembre. Sin embargo, la cifra media enmascara grandes diferencias entre plantas con fuertes crecimientos y otras que sufrieron importantes recortes de actividad.