El 'dieselgate' de Hino, propiedad de Toyota, crece. El fabricante japonés de vehículos industriales Hino ha anunciado la suspensión de sus ventas de varios modelos de camiones ligeros tras confirmarse que están afectados por nuevas irregularidades en los datos de sus emisiones contaminantes. El presidente de Toyota, Akio Toyoda, ha llegado a poner en cuestión el futuro de la marca Hino.
La compañía japonesa especializada en camiones, autobuses y maquinaria de construcción, que se encuentra bajo investigación de las autoridades niponas por falsificar datos de emisiones y rendimiento de sus vehículos, confirmó que estas irregularidades afectan a más de 70.000 unidades comercializadas desde 2019. Este anuncio llega después de que Hino señalara a comienzos de mes que los datos incorrectos reportados sobre otros de sus vehículos se remontan a casi 20 años, una década más que lo estimado en un principio.
Las irregularidades atañen a los datos remitidos a las autoridades japonesas sobre emisiones contaminantes y rendimientos de sus vehículos en las solicitudes de certificados de motores. Entre las malas praxis llevadas a cabo durante las inspecciones del fabricante se encuentran mediciones no ajustadas a la ley, no haber realizado las pruebas de durabilidad pertinentes, la falsificación de mediciones o el cálculo aleatorio de los datos a partir de otras mediciones.
Críticas de Akio Toyoda
Hino registró un descenso en la Bolsa de Tokio del 3,52 %, mientras que su matriz, Toyota, terminó la sesión sin cambios en la cotización de sus acciones.
El presidente de Toyota Motor, Akio Toyoda, expresó su "extrema decepción" por la nueva ronda de irregularidades que "traiciona la confianza de todos sus accionistas", y señaló que el grupo nipón "estudiará si Hino puede renacer como compañía digna de confianza".
Hino Motors es la última en sumarse a un largo listado de empresas japonesas del sector que remitieron a las autoridades datos incorrectos de emisiones de sus vehículos durante los últimos años.