La crisis económica desencadenada por el coronavirus ha provocado que vuelva a aparecer con fuerza el temor al cierre de la fábrica de Nissan de Barcelona. La histórica planta del sector del automoción español se ha convertido desde hace meses en una de las preocupaciones de responsables políticos como Raül Blanco. El secretario general de Industria asegura, en un ejercicio de realismo, que la coyuntura económica actual "complica" la continuidad de la planta de Nissan de la Zona Franca de Barcelona.
En un entrevista mantenida con la web Coche Global, Raül Blanco asegura que el Ministerio de Industria sigue trabajando para intentar convencer a la multinacional japonesa de que apueste por la planta de Barcelona y los 2.500 empleados que tiene en estos momentos.
Falta de inversiones de Nissan
"Seguimos trabajando en Nissan. Trabajamos día tras día para garantizar la continuidad de la planta junto con la empresa y los sindicatos. El objetivo está muy claro. Lo que hay que hacer es atraer inversiones que en los últimos años y hasta el momento no se han producido", explica.
El trabajo que han hecho todas las partes en los últimos meses para salvar la fábrica puede estar ahora seriamente amenazado. "Para tener esas inversiones -reconoce Blanco-, el momento no acompaña ahora y es mucho más difícil que el que teníamos hace seis meses. Nos complica la situación, hay que ser realistas. Eso no quita que vayamos a seguir trabajando al máximo nivel para conseguirlo".
Huelga indefinida
Los sindicatos de Nissan el futuro cada vez más negro y acaban de anunciar la convocatoria de una huelga indefinida a partir del 4 de mayo para exigir a la empresa que explique de una vez sus planes. De momento, la empresa ha comunicado que prevé que los empleados de una de las dos líneas de montaje vuelvan el día 4 para producir las unidades pendientes de entregar de la 'pick up' de Mercedes Clase X. Después de producir esas unidades, hacia final de mayo, la empresa enviará a los empleados a su casa "hasta nuevo aviso" ante la falta de previsiones de producción. Los plazos coinciden con la fecha en la que se podrían conocer los planes de reestructuración que anunciará el consejero delegado de Nissan, Makoto Uchida.
La factoría de Nissan puede ser una de las fábricas más amenazadas, aunque el tsunami del coronavirus también puede llevarse por delante otras plantas. "Puede haber afectación a nivel global de varias empresas, aunque todavía es pronto para saberlo. Aquellas que estaban en una situación más complicada les va a afectar un poco más. La cuestión es aquí como trabajamos. Hemos vivivo crisis muy difíciles. Siempre me remito a la crisis de 2008 a 2010, en la que todas las plantas salieron adelante y ese es el objetivo tambien ahora".