El consejero delegado de Nissan, Hiroto Saikawa, reconoció hoy que infló indebidamente su remuneración en varios millones de yenes especulando con los términos de cobro de un bonus salarial sujeto al rendimiento de las acciones de la empresa. Saikawa se convirtió en el número uno de Nissan después de la investigación interna encabezada por él mismo que denunció irregularidades de Carlos Ghosn.
La retribución en cuestión de Saikawa se pagó en el marco de un sistema de bonificación para directivos que les permite recibir un plus en su remuneración si el precio de las acciones de su empresa va bien. Según una investigación interna, recogida este jueves por medios locales como el diario Nikkei y la agencia de noticias Kyodo, en mayo de 2013 se informó de que la compañía había permitido a Saikawa retrasar una semana la fecha de pago predeterminada de este bono para beneficiarse de un aumento del valor de las acciones.
Esto le habría permitido embolsarse indebidamente 47 millones de yenes (unos 400.000 euros ó 442.000 dólares), según dichos medios. En declaraciones a los periodistas a primera hora del día, Saikawa reconoció el cobro del sobresueldo, aunque señaló que se debió a un "problema en la operación", que no era conocida por él ni la ordenó, y dijo que tiene intención de devolver la diferencia indebidamente embolsada, según recogió la cadena de televisión NHK.
Medidas disciplinarias
Las acciones de Nissan abrieron hoy a la baja en la Bolsa de Tokio, pero finalmente cerraron con una ganancia del 1,98 %, posiblemente gracias a la rápida reacción de Saikawa y al efecto balsámico que tuvo en los exportadores nipones el bloqueo en el parlamento británico de un Brexit duro y las perspectivas ante la nueva reunión comercial en octubre entre EEUU y China.
Saikawa no fue el único ejecutivo de Nissan que se benefició de la especulación de acciones en el marco del sistema de pago de bonus. Nissan cree que el sobrepago no violó ninguna ley japonesa, pero podría haber infringido la normativa interna de la compañía. El asunto se planteará en la reunión del consejo de administración que Nissan celebrará este mes y el fabricante dijo que examinará si es necesario aplicar medidas disciplinarias.
La compañía abrió una investigación sobre el asunto después de que el exdirectivo Greg Kelly, involucrado en el caso de supuesto fraude fiscal que le costó el puesto a su entonces presidente Carlos Ghosn, hablara sobre las acusaciones en junio en su primera entrevista tras ser puesto en libertad después de su detención en noviembre de 2018. Entre las acusaciones contra Ghosn por presuntamente infravalorar sus compensaciones en la compañía y beneficiarse personalmente de los activos corporativos, se incluye la supuesta ocultación de un plan de cobro de derechos de apreciación de acciones.