Después de la buena noticia de la flexibilidad para la automoción en la rebaja del CO2, el plan de la Comisión Europea incluye otras medidas menos alineadas con las peticiones del sector. No habrá plan europeo de incentivos al vehículo eléctrico, como reclamaban los fabricantes, aunque sí se destinarán más fondos para impulsar la fabricación de baterías en la UE, según el borrador del 'Plan de Acción Industrial para el sector europeo del automóvil' al que ha tenido acceso EFE. El plan será presentado oficialmente este miércoles en una comparecencia que se puede seguir en directo a través de Coche Global.

Sin ayudas a la demanda hasta 2026

El documento de 20 páginas busca simplificar la regulación en el sector y plantea una "recomendación sobre incentivos fiscales y no fiscales a la demanda" de vehículos eléctricos, aunque pospone cualquier decisión al respecto hasta 2026. A pesar de que varios Estados miembros han aplicado ayudas a la compra de eléctricos, la Comisión subraya que es necesario "un planteamiento más coordinado a escala europea".

Bruselas se compromete a "intercambiar las mejores prácticas y lecciones aprendidas" sobre los sistemas de incentivos para los consumidores, pero descarta implementar un programa de subvenciones comunitarias en el corto plazo.

El canciller alemán, Olaf Scholz, defendió la necesidad de subvencionar los coches eléctricos fabricados en Alemania y urgió a la UE a encontrar "una solución a escala europea" para impulsar la compra de estos vehículos. El presidente de Anfac y directivo de Renault, Josep Maria Recasens, respaldó también la petición de un plan de incentivos europeo que cuantificó en unos 5.000 millones de euros.

Más flexibilidad en la reducción de emisiones

El plan sí confirma la propuesta anunciada por la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen, que otorga a los fabricantes tres años adicionales para alcanzar los objetivos de reducción de CO₂. La modificación permitirá a las marcas "compensar" el exceso de emisiones de 2025 con avances futuros y, al menos, retrasar las sanciones.

Cinco pilares estratégicos y apuesta por el vehículo autónomo

El plan europeo se basa en cinco pilares clave:

  • Innovación y digitalización
  • Movilidad limpia
  • Resiliencia de la cadena de suministro
  • Competencias y dimensión social
  • Acceso a mercados

Uno de los objetivos clave es que la industria automovilística europea no solo afronte la transición hacia los vehículos de emisiones cero, sino que lidere su desarrollo. En este sentido, el documento destaca la promoción del vehículo autónomo. Bruselas trabajará con los Estados miembros para crear al menos tres bancos de pruebas transfronterizos y corredores europeos de conducción automatizada, además de un marco normativo común para la conducción autónoma.

3.000 millones de euros para baterías

La Comisión Europea también considera crucial apoyar "toda la cadena de valor de las baterías de nueva generación" y, por ello, ha anunciado una inversión de 3.000 millones de euros dentro del Fondo de Innovación. Este programa destinará hasta 1.800 millones de euros en los próximos dos años para impulsar la producción de baterías en la UE.

Asimismo, se estudiará la posibilidad de conceder ayudas financieras para fomentar el reciclaje de baterías y mejorar la gestión de los vehículos al final de su vida útil.

Fomento de la inversión extranjera

Bruselas busca reforzar el atractivo del sector automovilístico europeo y propondrá mejores condiciones para las inversiones extranjeras en el sector. El objetivo es aumentar el valor añadido de la industria automovilística dentro de la Unión Europea y fortalecer su competitividad frente a mercados como China y Estados Unidos.