La crisis del coronavirus pasará factura a BMW. El grupo alemán prevé una reducción significativa de los resultados económicos en 2020 debido al parón de las ventas y la producción. La compañía parará sus plantas europeas y algunas de otras áreas hasta el 19 de abril.
El grupo automovilístico alemán contabilizó un beneficio neto atribuido de 4.915 millones de euros en 2019, lo que representa una disminución del 29,5% en comparación con los 6.974 millones de euros que ganó en 2018, según datos publicados por la empresa este miércoles.
De cara al ejercicio actual, el grupo anticipa que su beneficio antes de impuestos se situará "significativamente" por debajo del contabilizado en 2019, principalmente por el efecto de la crisis del coronavirus, y por el aumento de las inversiones. "La actual incertidumbre en relación con la expansión global y los efectos del coronavirus hacen difícil ofrecer una previsión ajustada del desarrollo de negocio del grupo BMW para el ejercicio financiero 2020", aseguró la empresa.
Ajustar la producción a las ventas
La compañía, teniendo en cuenta los últimos desarrollos del virus, anticipa que las medidas de contención del coronavirus tendrán un impacto negativo sobre sus entregas en la mayor parte de los mercados. El consejero delegado de BMW, Oliver Zipse, señaló que la compañía está llamada a la solidaridad y a la acción responsable y que apoyará las medidas que se han adoptado para la contención de esta enfermedad. "BMW Group está respondiendo al previsible desarrollo de la demanda en los mercados mundiales de automóviles ajustando los volúmenes de producción en una etapa temprana y hará un uso completo de la amplia gama de instrumentos disponibles para maximizar la flexibilidad", aseguró el directivo.
Por su parte, el presidente del comité de empresa, Manfred Schoch, apuntó que la principal prioridad es proteger la salud de los trabajadores y mantener sus puestos de trabajo. Por ello, señaló que el comité de empresa ha acordado tres herramientas para lograr estas metas. Se llevará un recuento flexible de las horas de trabajo, se incentivará el teletrabajo y se aplicará la normativa laboral de la empresa. "Estoy convencido de que estas tres herramientas permitirán navegar con seguridad a nuestro personal a través de la crisis de la coronavirus", añadió.
Aumento de inversiones
BMW resaltó que sus resultados en 2019 se vieron afectados en el primer trimestre del año anterior por una provisión de 1.400 millones de euros en relación con una eventual multa por parte de la Comisión Europea (CE) por una supuesta colaboración con Daimler y Volkswagen para llegar a pactos con el fin de restringir la competencia en el desarrollo de tecnologías de reducción de emisiones de turismos tanto de gasolina como de diésel entre 2006 y 2014.
La facturación de la firma muniquesa se situó en 104.210 millones de euros al término de 2019, un 7,6% de crecimiento, mientras que el beneficio operativo se contrajo un 17%, hasta alcanzar 7.411 millones de euros. La multinacional comercializó 2,53 millones de automóviles de sus marcas BMW, Mini y Rolls-Royce en el conjunto del año pasado, lo que se traduce en una subida del 2,2%, al tiempo que su división de motocicletas, BMW Motorrad, matriculó 175.162 unidades, un 5,8% más.
Durante 2019, la empresa invirtió 5.952 millones de euros en actividades de Investigación y Desarrollo (I+D), un 11,8% más, mientras que la plantilla mundial de la corporación cerró 2019 con 133.778 efectivos, un 0,7% menos. El grupo BMW invertirá más de 30.000 millones de euros hasta 2025 en actividades de I+D para convertirse en un líder en innovación. "Esto expresa nuestra confianza en el desarrollo del negocio del futuro", aseguró.