Los fabricantes de automóviles han abandonado el guante de seda que mantenían con el Gobierno y han alzado su voz para mostrar el "malestar" del sector con el Ejecutivo. Ante la tormenta más que perfecta en la se adentra la automoción con viejos y nuevos problemas, la Asociación de Fabricantes de Automóviles (Anfac) ha publicado un duro comunicado en el que alertan de que la falta de medidas contundentes de apoyo al sector en los Presupuestos Generales de 2022 agrava todavía más la situación de la industria.
Las marcas automovilísticas tenían la esperanza de que las buenas palabras que expresó el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en la reunión de la asamblea de Anfac celebrada en el reciente salón Automobile Barcelona se convirtieran en hechos. Es cierto que Sánchez se presentó con una nueva medida, un plan de ayudas para renovar flotas con coches eléctricos, pero otros problemas de calado pendientes no han tenido la respuesta esperada por parte de los fabricantes de vehículos. Muchos de ellos se quejaron entonces de que el presidente ni siquiera escuchó los planteamientos de los directivos en esa reunión, que acabó con una foto de familia con Pedro Sánchez y la ministra de Industria, Reyes Maroto.
Impuesto de matriculación
Desde entonces, la situación no ha hecho más que empeorar por la continua caída de las ventas y por la proximidad de cambios en 2022, como la subida, de nuevo, del impuesto de matriculación, que el sector ve como otro palo en la rueda de la recuperación amenazada ahora por el impacto de la falta de microchips.
"Ante el veto masivo por el PSOE a todas las enmiendas para mejorar la situación del sector de la automoción e impulsar la electrificación que distintos partidos habían presentado para los Presupuestos Generales del Estado 2022, la Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) alerta de que los problemas de la industria se están agravando en un entorno de crisis, incertidumbre y falta de medidas contundentes para el apoyo a la industria, el impulso a la electrificación y la renovación del parque", asegura Anfac en su comunicado.
La patronal destaca que el Ejecutivo ha rechazado todas las enmiendas, presentadas por "partidos políticos de diferente sesgo", con medidas relativas a mejoras en la fiscalidad de los vehículos electrificados y para aplazar la subida del impuesto de matriculación, que, según Anfac, generaban "condiciones positivas para avanzar en la recuperación, en la penetración del vehículo electrificado y en la renovación del parque, y eran el complemento necesario a otras medidas posibles gracias a los fondos cuya concesión ha aprobado Bruselas".
"Momento crítico"
El resultado de ese veto es que se ha creado un "malestar en la industria de automoción por lo que consideran como una "gran incertidumbre en un momento crítico". A la falta de esas nuevas medidas contundes que reclama el sector se suma el rechazo mostrado por Anfac a una reforma laboral que restrinja la actual flexibilidad o encarezca los costes de personal, una posición en línea con la expresada por la CEOE. "Supone un riesgo grave en la competitividad de las fábricas españolas, cuya necesaria flexibilidad es posible gracias al diálogo social a nivel empresa", advierte Anfac, que teme que el refuerzo de los convenios sectoriales vaya en contra de la situación actual.
Mesa de Automoción
El presidente de Anfac y vicepresidente de producción de Renault, José Vicente de los Mozos, que ya había manifestado con anterioridad su rechazo a una nueva reforma laboral, alerta ahora del empeoramiento de la coyuntura y de los riesgos para la competitividad de la industria española. "Ante esta situación de incertidumbre en lo fiscal y lo laboral, se necesita una visión integral del sector de la automoción y una política de apoyo más completa que impulse la industria, la electrificación y también la renovación del parque. Se están agravando los problemas y los nuevos riesgos complican mucho la situación, en un momento en el que necesitamos certezas pues hay que competir ferozmente con otros países de nuestro entorno para adjudicarnos los modelos de futuro", ha indicado De los Mozos en el comunicado.
A la vista del agravamiento de los problemas y amenazas para el sector, Anfac se suma a las críticas de otras patronales y de los sindicatos de la parálisis de la Mesa de Automoción, un órgano que creó el Gobierno de Pedro Sánchez para discutir las medidas con el sector del automóvil. "La Mesa debería ser, a juicio de la asociación, el foro central donde se traten conjuntamente medidas y prioridades que empujen la transformación de la automoción en España, pero manteniendo la producción y el empleo de un sector clave para la economía española", destaca la patronal de los fabricantes de automoción.