Los problemas a los que se enfrenta la movilidad eléctrica se van reduciendo poco a poco pero hay uno que es una pesadilla para los usuarios de estos vehículos. Planificar una ruta y llegar a un punto de carga de vehículos eléctricos que no funciona es de lo más frustrante. La cifra de cargadores averiados o decorativos puede rondar el 50%, según las estimaciones que hace la empresa Wallbox en base a la información que facilitan los usuarios a través de la plataforma Electromaps. Para aumentar la fiabilidad de la red de carga, la firma catalana Wallbox ha entrado en el mercado de los enchufes público rápidos y ultrarrápidos.

Wallbox empezó su andadura diseñando, fabricando y vendiendo puntos de carga para domicilios particulares o para comunidades reducidas y ahora quiere poner un pie en el mercado emergente de las recarga pública a alta velocidad. Los dos nuevos modelos Supernova (60 kW de velocidad de carga) e Hypernova (350kW), presentados en el Salón del Automóvil de Múnich, ofrecen potencia de carga y fiabilidad para evitar parones ante algunas situaciones habituales que tienen lugar durante la carga teniendo en cuenta la gran cantidad de modelos que se enchufan. 

Reducir los parones

Los parones por algunas irregularidades en la comunicación entre el coche y el poste al que está conectado son algo habitualen muchos cargadores y obliga a intervenir a los técnicos de mantenimiento ya sea a distancia o de forma presencial en la ubicación. Enric Asunción, consejero delegado y cofundador de la 'startup' barcelonesa, asegura que los nuevos modelos de la firma permiten una mayor fiabilidad gracias a una gestión más eficiente de las incidencias. 

Sin embargo, Asunción asegura que solo podrán mejorar los puntos de carga en activo y conectados a la red eléctrica, ya que hay muchos cargadores instalados pero que no están dados de alta para funcionar.

Reducción de costes

Además de la fiabilidad, Wallbox quiere mejorar otro de los frenos a la ampliación de la red de carga, los costes de compra y de instalación de los cargadores. "El Supernova se puede manejar entre dos personas sin necesidad de grúas, que encarecen mucho el coste de instalación", aseguró a Asunción a Coche Global en el Salón de Múnich. El modelo Supernova se vende por unos 12.000 euros y ya ha recibido pedidos importantes, como las1.000 unidades encargadas por Iberdrola. El modelo ultrarrápido Hypernova, que permite cargar al 100% un coche eléctrico en 15 minutos, se empezará a producir y entregar a los clientes a final de 2022.   

La compañía catalana está a punto de inaugurar su nueva planta de montaje de cargadores de la Zona Franca de Barcelona y ha anunciado que abrirá en Texas su primera fábrica en Estados Unidos, que se prevé que empiece a producir en junio de 2022. Además, Wallbox tiene en funcionamiento su primera factoría en Sant Andreu de la Barca y otra en China mediante una sociedad conjunta. Los planes de la empresa prevén pasar de los 100 millones actuales de facturación anual a 1.000 en los próximos años. Un paso importante en esa estratehia es la salida a bolsa en EEUU, que se materializará a final de este mes de septiembre.