La entrada en vigor del WLTP ha puesto patas arriba el mercado de vehículos y las fábricas. Agosto, un mes habitualmente de poca actividad industrial, registró un aumento de producción de coches del 44% por el efecto del nuevo test de emisiones WLTP. En agosto se ensamblaron en España una inusual cifra de 80.315 turismos, lo que representa un incremento del 44% en relación con el mismo mes de 2017. En cambio, la producción de vehículos comerciales e industriales cayeron un 22,76%, según los últimos datos estadísticos publicados por la Asociación de Fabricantes de Automóviles (Anfac).
Retraso de las vacaciones en varias fábricas de vehículos
En conjunto, la fabricación de todo tipo de vehículos subió un 25% al haberse alcanzado las 99.065 unidades. En julio, la producción de vehículos se incrementó un 4,4%, mientras que el alza acumulada en ocho meses fue del 5,11%, con 1,9 millones de vehículos. Anfac interpreta esta mejora como una demostración del "esfuerzo constante que llevan las plantas productoras españolas para adaptarse a las demandas y novedades del mercado". Aunque Anfac no lo menciona, la inusual subida de la actividad en la industria automovilística española en agosto coincide con el retraso de las vacaciones en varias factorías como consecuencia de la entrada en vigor del nuevo protocolo WLTP.
Las factorías de Renault de Valladolid y Palencia, la de Seat de Martorell y la de PSA de Vigo empezaron las vacaciones más tarde de lo habitual para producir más vehículos con la anterior homologación de emisiones de gases. Las marcas pueden vender todavía esos vehículos como restos de serie con un máximo del 10% de sus ventas anuales.
La llegada del WLTP causa una montaña rusa en las fábricas
De forma paralela, las exportaciones de vehículos crecieron en julio un 2% y en agosto, un 32% debido al mismo efecto de la entrada en vigor del WLTP. De enero a agosto, las ventas de vehículos 'made in Spain' en el extranjero subieron un 5,7% y llegaron a 1,6 millones de los 1,9 millones fabricados en España. La llegada de la homologación WLTP provocó un aumento de las ventas y la producción en agosto, pero también causa días de paralización de las fábricas durante este mes de septiembre por falta de los nuevos motores ya certificados. Esta situación de montaña rusa está afectando especialmente a las fábricas de Volkswagen de Navarra y de Seat de Martorell.