La inversión del sector industrial ha vuelto con ímpetu a Cataluña. Después de un periodo de observación de la situación creada por el conflicto político a raíz del pulso independentista y de la aplicación del artículo 155 de la Constitución, la industria aumentó sus inversiones en Cataluña un 12% en 2017 y prevé aumentar el ritmo inversor en 2018 hasta un 13,4%.
Mejora de perspectivas desde octubre de 2017
El volumen de las inversiones comunicadas por las empresas en la encuesta que lleva a cabo la Generalitat fue en 2017 muy superior a la registrada en 2016, un año en que se produjo una situación próxima a un parón con un 2,9% frente a un 12% el año pasado. La reactivación de la inversión se aprecia también en la comparación de la expectativa para 2018 (13,4%) con las previsiones que manifestaban las empresas en otoño de 2017, cuando esperaban invertir un 5,8% más este año. Cuando se hizo la encuesta, el conflicto político se encontraba en su apogeo con el referéndum celebrado el 1 de octubre, la declaración unilateral de independencia del Parlament el 27 de octubre y la aplicación inmediata del artículo 155 por parte del Gobierno central.
Descenso de la inversión de la gran industria en Catalunya
A pesar de la mejora de la inversión industrial, el análisis detallado de los datos muestra que las grandes empresas recortaron su esfuerzo inversor en un 0,1% en 2017, frente a un incremento sustancial del 21,7% de las pymes. Para 2018, las pequeñas y medianas empresas reducen sus fuertes inversiones del año anterior con una previsión de mejora del 15,8%, mientras que las grandes compañías del sector industrial dan un salto cuantitativo al pasar de un -0,1% a un aumento del 10,3%. Entre los motivos para llevar a cabo la inversión industrial, las empresas encuestadas afirman que los factores técnicos ganan peso frente al marco político y económico, que cae 26,5 puntos en la valoración que hacen las grandes compañías.
La industria de automoción invertirá un 10,4% más
Pero no toda la industria prevé aumentar sus inversiones en las fábricas de Cataluña. Entre los cuatro que invertirán más este año, la industria de automoción prevé un incremento del 10,4%, frente al 47% en energía y agua, 30% en bienes de equipo y un 19,6% en bienes de consumo duradero. En cambio, otros sectores declaran que reducirán sus inversiones en 2018: alimentación (-15%), bienes intermedios (-4,2%) y bienes de consumo no duradero (-2,3%). La fábrica de Seat de Martorell se ha convertido en un motor del sector con un aumento de la producción y de la plantilla, en contraste con la reducción de actividad en la planta de Nissan de Barcelona, que prepara un plan de prejubilaciones y bajas incentivadas.