El 'carsharing' se abre paso con más velocidad de lo que cabía esperar hace poco. Madrid se está convirtiendo en un laboratorio del coche compartido, especialmente el de coches eléctricos y de recogida y entrega flexible. Después de un año de prueba en exclusiva, la filial de Daimler Car2Go tiene compañía con otras dos compañías que pueden revolucionar el uso del coche en Madrid. Las operadoras de 'carsharing' han acudido al panal de rica miel que les proporciona Manuela Carmena con las restricciones al tráfico y aparcamiento de vehículos privados de combustión en el centro de Madrid. Este mes de diciembre, la flota de coches eléctricos compartidos se ha multiplicado por más de dos al pasar de los 500 Smart de Car2Go a más de 1.000 al suma otros 500 Citroën C-Zero de Emov, impulsada por PSA y Vulog, y unas decenas de Tesla Model S de Uber.
Diferencias entre Emov y Car2Go
La oferta del grupo Peugeot-Citroën ha igualado los precios del sistema pionero de Daimler aunque con algunas diferencias en el servicio como una zona de cobertura más amplia y la posibilidad de tener cuatro plazas en lugar de dos y un maletero más amplio. La expectación creada saturó la aplicación para 'smartphones' en las primeras horas, tal como explica movilidadelectrica.com en la comparación entre Emov y Car2Go. Si Car2Go tenía alguna tentación de subir las tarifas promocionales de 0,19 euros el minuto, ahora lo tiene más difícil por el nuevo competidor.
Unos días después, la norteamericana Uber ha anunciado que pone en las calles de Madrid decenas de las berlinas deportivas de lujo eléctricas Model S de Tesla con conductor. En este caso, el precio es bastante más caro (0,45 euros el minuto) aunque el servicio de Uber One en Madrid va dirigido más a clientes corporativos, según dice en revistagq.com uno de los chóferes que ofrecen su vehículo en Uber. Con esta iniciativa, el fabricante de coches eléctricos de lujo también calienta motores para la apertura de sus primeras tiendas en Madrid y Barcelona en su estrategia de desembarco de Tesla en España.
Economía colaborativa y taxis
A estos sistemas de flotas empresariales de coches compartidos hay que añadir la oferta de las empresas de economía colaborativa como BlaBlaCar y Social Car, en las que los vehículos son de particulares que alquilan o ceden plazas a otros usuarios, y la de compañías de alquiler por horas como Avancar. Y por supuesto sigue habiendo taxis convencionales y agrupados en plataformas como MyTaxi. La movilidad urbana está cambiando y Madrid actúa como un gran laboratorio del 'carsharing'. De momento los consumidores y los ciudadanos de Madrid se podrán beneficiar de esa competencia con unos precios más ajustados y menos contaminación. ¿Habrá mercado para todos?
